El Real Madrid ha recuperado la confianza a fuerza de goles y ha destrozado al modesto Viktoria Plzen (0-5). El conjunto blanco va cuidándose de las heridas con Santiago Solari en el banquillo y con un inspirado Karim Benzema para recuperar el liderato de su grupo en la Champions League.

La reconstrucción del campeón de Europa empieza a llegar a base de goles y de buenos resultados. Desde el cambio de entrenador sigue el pleno, tres de tres, pero sin una gran prueba hasta ahora. En Pilsen también se ha enterrado el debate de la portería, apostando por Thibaut Courtois, y ha sentado en el banquillo a Modric, Isco y Marc Asensio.

Los goles lo tapan todo. Hasta las dudas defensivas delante de cualquier rival, poderoso o modesto, que se ha apoderado de un inicio en que el ímpetu del Viktoria ha generado minutos de problemas. Pero el factor fortuna, tan en contra de Julen Lopetegui, ha cambiado y ahora son los travesaños los que de nuevo evitan los goles del rival y las expulsiones que nadie ve de Sergio Ramos.

Pero los goles, aquello que tanto ha condicionado el mal inicio de la temporada del Madrid, por fin han aparecido. En la primera mitad Benzema ya ha hecho un doblete y Casemiro y Bale han completado una goleada que ya era de escándalo en los primeros 45 minutos. Para cerrar la goleada Kroos ha conseguido certificar una manita fuera de casa.

El Madrid ya es líder de su grupo gracias a la diferencia de goles y empieza a acercarse a la clasificación para los octavos de final. Los blancos se acabarán jugando el liderato del Grupo G con la Roma.