No hay día que pase que las instituciones que dominan España no sorprendan. El último caso ha sido en el mundo del fútbol, precisamente a través de Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Aprovechando el sorteo de la fase previa de la Copa del Rey, ha lanzado un nuevo mensaje para defender el nuevo formato de la Supercopa de España y el país que les acoge.
Recordemos que la competición este año ha cambiado de fecha y de funcionamiento, porque hay cuatro finalistas, con dos semifinales y una final. Un minitorneo de tres partidos que se disputará a principio del 2020, pero no se jugará en territorio español, sino que se hará en Arabia Saudí. Un país amigo de España porque se le venden armas y porque históricamente también ha habido buenas relaciones entre la monarquía saudí y la española, ahora con el rey Felipe VI al frente.
Ahora bien, aparte de ser un régimen donde se vulneran derechos humanos y las mujeres no tienen libertades, entre otros temas, Arabia Saudí sigue creando puentes con España. Este último caso está relacionado con el fútbol, gracias a Gerard Piqué, y los mandatarios españoles defienden encarnizadamente el acuerdo.
EFE
Salvadores del franquismo saudí
Luis Rubiales ha explicado nuevamente que es una decisión obligada porque se tenía que encontrar una solución si no se quería perder definitivamente la competición (que los grandes clubs hubieran agradecido). Y el presidente de la RFEF ha vuelto a justificar que la elección es sobre todo por motivos económicos, como todo el mundo se olía, pero también porque se sienten como unos salvadores: "Cuando hay países con desigualdades en salud, alimentación o sociales, puedes darles la espalda o tratar de ayudarles. El dinero que recibiremos de Arabia es el mismo que nos daban otros candidatos, os lo aseguro. No es el principal motivo".
Rubiales, que ha catalogado la competición como "la Supercopa de la igualdad", ha vuelto a explicar que algunos de los objetivos son "que las mujeres entren libremente en los estadios, crear escuelas de fútbol femenino y la obligación de establecer competiciones femeninas, una de ellas de categoría sénior". Por lo tanto, según él mismo se autoafirma, hacen un bien para un país retrógrado y con necesidades de modernización.
Pero alto, para acabar de arreglarlo, ha comparado la situación que vive a día de hoy Arabia Saudí con la que hace cincuenta años vivía España con la dictadura de Francisco Franco: "El fútbol llegó a España en el Mundial de 1982, pero se le dio en el año 1964... cuando los niños iban a los colegios de niños y las niñas a los colegios de niñas... cuando las mujeres no podían abrir una cuenta en un banco".
A partir del minuto 3'44"
"¿Qué hacemos? ¿Les damos la espalda a los hombres y a las mujeres que están allí? ¿O les ayudamos a su transformación?", se pregunta Rubiales. Pues quien parece transformarse es la RFEF, Real y que se acuerda del franquismo en sus discursos.