El CF Reus sigue arrastrando los problemas económicos que lo acabaron expulsando de la Segunda Divisió A. La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha tomado la decisión de relegar el conjunto catalán a Tercera División.
El motivo de esta decisión ha sido la no presentación de un aval bancario antes del 10 de julio, la fecha límite para que la sociedad anónima hiciera efectivo este requerimiento. El administrador concursal, David López, no ha pagado el aval bancario de 150.000 euros a tiempo y la RFEF habría aplicado el artículo 105 del Reglamento General, que reclama el aval para formar parte de 2ªB: "Los clubes que tomen parte en la Segunda División Nacional "B" y se encuentren en alguna de estas situaciones, deberán suscribir los siguientes avales, sin cuya entrega no serán admitidos en la competición".
De esta misma manera se vería afectado el Reus B, el filial del conjunto reusense. Esta temporada pasada quedó séptimo clasificado, manteniéndose en la categoría, pero el hecho de ocupar plaza el primer equipo, el filial bajaría automáticamente a Primera Catalana.
CF Reus Deportiu
La FCF esperará más decisiones
Tras la decisión de la RFEF, la Federación Catalana de Fútbol (FCF) ha comunicado que no está en disposición de saber cuál será la situación del Reus en Tercera y espera saber cómo se compensa la plaza que deja vacante en 2ªB.
"Ante la resolución emitida por la RFEF este miércoles 17 de julio, por la que se acuerda la no admisión del CF Reus Deportiu en la Segunda División 'B', la Federación Catalana de Fútbol comunica que no se encuentra en disposición de establecer cuáles serán sus efectos sobre el Grupo 5 de la Tercera División, así como en las categorías territoriales del fútbol catalán, hasta el momento en que la RFEF determine cómo quedará cubierta la vacante generada en el Grupo 3 de la Segunda División 'B'", dice la FCF.