Giro inesperado en los acontecimientos, que ha provocado que Pedro Acosta rectifique en su decisión, y acabe decantándose por rechazar a Ducati. Porque había sido colocado insistentemente en el equipo de su íntimo amigo, Valentino Rossi, que le daba la oportunidad de probar una Desmosedici, y ocupar el asiento de Fabio Di Giannantonio o de Franco Morbidelli en el Pertamina Enduro VR 46 Racing Team. Una posibilidad que ha acabado quedando descartada.
Para empezar, porque en el Red Bull KTM Factory Racing Team habían dejado muy claro que no tenían la intención de prescindir de su gran estrella. Sigue teniendo contrato en vigor para otra campaña más, y en ningún momento se han planteado dejarle salir. Y aunque la relación con los mecánicos y los líderes del equipo se haya complicado en los últimos meses, por culpa de sus polémicas declaraciones, sigue existiendo mucha fe en su talento.
No hay que olvidar que el ‘37’ es considerado como la gran esperanza del motociclismo, y tan solo necesitó tres años para llegar a la categoría reina, consiguiendo el campeonato de Moto3 y de Moto2. Su adaptación a MotoGP fue inmediata, pero ahora parece haberse estancado, y no solamente sigue sin conseguir su ansiada victoria, sino que todavía no ha sido capaz de subir al podio en todo lo que llevamos de temporada, ni siquiera, en la Tissot Sprint.
Una situación que tiene desesperado a Acosta, aunque por fin comienza a ver la luz al final del túnel. Porque la marca austríaca ha traído nuevo material que ha mejorado el rendimiento de la moto, y así se ha podido ver en algunos Grandes Premios, como el de Italia, el de los Países Bajos, el de Aragón, o más recientemente, en el de Alemania. El murciano estuvo cerca de pelear por el podio, pero por un motivo o por otro, no tuvo la suerte que necesitaba.
‘El Tiburón de Mazarrón’ confía en seguir mejorando, y en KTM le han prometido que no dejarán de trabajar, para poder crear una moto capaz de competir con las Ducati.
Maverick Viñales, la esperanza de KTM y el ejemplo a seguir para Acosta
Otro motivo importante por el cual Acosta no forzará su salida de KTM es porque ha quedado demostrado que la moto puede ser competitiva, y así se ha comprobado con Maverick Viñales.
Aunque sea su primer año en la marca de Mattighofen, estuvo en el podio en el GP de Qatar, aunque acabó siendo sancionado, y ha estado constantemente entre los mejores clasificados cada fin de semana.