Mikel Oyarzabal es un símbolo de la Real Sociedad. Llegó a la cantera del club en 2011 y debutó con el primer equipo a los 18 años. En más de una década, ha jugado más de 300 partidos, convirtiéndose en ídolo de la afición y símbolo de fidelidad y compromiso.
El curso pasado firmó una campaña excelente. Con 53 partidos disputados, 18 goles y 8 asistencias, fue el máximo goleador del club y su principal referencia ofensiva en LaLiga y en Europa. Además, también a brillado en la Selección Española, donde se ha consolidado como delantero centro en la era de Luis de la Fuente. En los cuatro partidos disputados en 2025 con La Roja, anotó tres goles, incluyendo uno crucial en la semifinal de la Liga de Naciones ante Países Bajos, además de marcar en la tanda de penales.
La etapa de Mikel Yarzabal en la Real Sociedad podría haber llegado a su final
Sin embargo, el escenario en el que se encuentra le invita a contemplar una salida. El equipo no consiguió mantener su plaza europea y eso podría precipitar decisiones importantes. Aunque el jugador ha declarado en más de una ocasión su deseo de retirarse en Anoeta, la realidad es que el proyecto de la Real Sociedad atraviesa un momento de revisión estructural. Y algunos pesos pesados como Oyarzabal podrían dejar el club.
En este contexto, aunque desde San Sebastián insisten en que su capitán es intransferible, en los despachos del club ya no descartan una posible salida este mismo verano. El interés de la Lazio, confirmado por diversos medios italianos, ha sido más que un simple sondeo. Es una petición expresa del técnico Maurizio Sarri, quien considera al internacional español una pieza clave para su nuevo proyecto en Roma.
Una venta dolorosa, pero necesaria para todas las partes
Las informaciones apuntan a cifras que rondan los 40 millones de euros por su fichaje. Una cifra que le iría de lujo a la Real para rellenar las arcas de cara al nuevo proyecto de Sergio Francisco, relevo de Imano Alguacil en el banquillo.
El jugador, por su parte, ha declarado en más de una ocasión su deseo de retirarse en Anoeta. Pero sabe que a sabe que sus 28 años está en su prime. Y que si no da un paso adelante ahora, difícilmente podrá hacerlo en el futuro. Será complicado que llegue más lejos si se queda en San Sebastián. Con todo, aunque el idilio entre jugador y club es un hecho, lo cierto es que las circunstancias actuales tienen a Oyarzabal más fuera que dentro.