El resurgimiento de Marco Asensio en este inicio de 2023, unido a que el Real Madrid necesita renovar a algunos jugadores para darle valor a la purga que se viene, provocó que Florentino Pérez le diera una segunda oportunidad. El club blanco decidió apostar por Marco Asensio, luchar para que el jugador renovara, reiniciando las conversaciones con su representante, Jorge Mendes. El Real Madrid aceptó que necesitaba a Marco Asensio, por lo que le mejoró un poco la oferta inicial, para intentar cerrar el caso lo antes posible.
El gran problema es que ha llegado a oídos de Florentino Pérez de que el entorno de Marco Asensio ha seguido jugando a dos bandas, pues mientras está negociando su renovación con el Real Madrid le ha vuelto a plantear al Barça la opción de cambiar el Santiago Bernabéu por el Camp Nou, una traición que lo ha acabado de sentenciar.
El juego de Marco Asensio
Y es que en el Real Madrid están hartos de las formas de Marco Asensio. Ya en verano, en una rueda de prensa de la selección española, dejó entrever el panorama actual, que en aquellos momentos parecía improbable. Florentino Pérez le comunicó que si no renovaba se iría traspasado, a lo que Asensio respondió, en público, que había una tercera vía, la de seguir una temporada más en el Real Madrid, sin renovar, para después irse a coste cero.
Llegado el mes de febrero, Marco Asensio sigue jugando en el Real Madrid y con un contrato que expira dentro de 4 meses. El mallorquín tiene la sartén por el mango, pues a toda la situación hay que añadir que está jugando mucho, lo que todavía le permite que más clubes lo tengan en su lista de futuribles, entre ellos el Barça.
Marco Asensio se autosentencia
Mientras el jugador rendía bien, como ha sucedido en el caso de Dani Ceballos, todo estaba tranquilo. El problema es que contra el Mallorca el papel de Asensio fue pésimo, pues el jugador completó un partido horrible, a lo que añadió el gran fallo en el penalti sobre Vinícius, un gol que probablemente habría sido el inicio de la remontada. Marco Asensio ejecutó muy mal el penalti, un fallo que acabó de hundir al Real Madrid y que dio alas al Mallorca para seguir luchando para mantener el 1-0.
Marco Asensio ha colmado la paciencia del Real Madrid, que ya tiene decidido dejarlo salir. Falta por ver si Carlo Ancelotti le sigue dando minutos o si, por el contrario, el mallorquín pasa al ostracismo, como ya le ha ocurrido a Odriozola o a Mariano Díaz, que al negarse a ayudar al Real Madrid han pasado a ser suplentes habituales, sin prácticamente oportunidades para jugar.