Lamine Yamal ya ha demostrado que, a sus 17 años, está a un nivel estratosférico. La perla del Barça es un caso sin precedentes que cada día maravilla con sus actuaciones, pero este miércoles, en la ida de las semifinales de la Champions League contra el Inter de Milán (3-3), subió un escalón más.
El niño sin miedo de Rocafonda demostró que no hay escenario que le pueda hacer vacilar y, a pesar de ponerse el Inter 0-3 en el marcador, él solo metió al Barça de nuevo en la eliminatoria con un golazo al más puro estilo Messi. La brillante actuación de Lamine Yamal de este miércoles no solo se resume con su gol, sino que fue un constante dolor de cabeza para el Inter entero, que se vio obligado a disponer a Bastoni y a Mkhitaryan en constantes ayudas a un Dimarco totalmente desbordado. Simone Inzaghi no escatimó en tratar de desactivar la mayor amenaza blaugrana, y de la misma manera que Lamine maravilló al mundo entero, también dejó boquiabierto al técnico nerazzurro: "Lamine Yamal es un fenómeno que solo pasa cada 50 años".

Inzaghi, sobre Lamine Yamal: "No había visto a un jugador como él en los últimos 8 o 9 años"
A pesar del pequeño susto que Lamine Yamal dio durante el calentamiento, el '19' del Barça estuvo especialmente inspirado contra el Inter. El primero en desesperarse fue Dimarco, pero también un Inzaghi que no tuvo otra que rendirse al talento de un futbolista que trastocó por completo su sólido bloque bajo: "No había visto a un jugador como él en los últimos 8 o 9 años. Nos creó enormes problemas.
Tuvimos que duplicar su cobertura y, cuando eso no fue suficiente, incluso un tercer jugador ayudó y abrió otros espacios", admitió. Y es que con la versión que mostró Lamine Yamal este miércoles, era prácticamente imposible que la eliminatoria se fuera a Milán sin que el Barça marcara ningún gol.

Con Lamine Yamal obligando a Bastoni y a Mkhitaryan a estar constantemente pendientes de la cobertura a Dimarco, aparte del desgaste físico que provocó el prodigio culé en las filas italianas, era un constante generador de espacios. Aunque el Inter planteaba un partido imposible por dentro, no lo consiguió por Lamine Yamal. Con todo, todo se decidirá en Milán en un partido que Inzaghi ha definido "como una final contra el mejor equipo del mundo". Con el Barça sin Kounde y el Inter sin Lautaro, las cartas ya están reveladas.