Pep Guardiola, entrenador del Manchester City, ha aceptado este lunes la multa de la Federación Inglesa de Fútbol (FA) por lucir el lazo amarillo en su indumentaria durante los partidos oficiales. Guardiola tenía hasta este lunes a las 18.00 horas para responder ante el máximo organismo del fútbol inglés, que le había abierto un expediente por contravenir las normas publicitarias de la entidad al exhibir "un mensaje político" en su vestimenta, "específicamente un lazo amarillo".

El lazo se ha convertido en un símbolo pidiendo la libertad de los presos políticos catalanes. Guardiola reclama la libertad de Jordi Sánchez, Jordi Cuixart, en la cárcel desde hace más cuatro meses, y Joaquim Forn y Oriol Junqueras, encarcelados desde el pasado 2 de noviembre.

La FA ya había advertido a Guardiola sobre el uso de símbolos con trasfondo político, cosa que vulnera las reglas de la Federación, aunque el técnico siempre ha declarado que no le importaba ser suspendido por este motivo. En su respuesta a la acusación, el Manchester City y el entrenador catalán niegan que el lazo sea un símbolo político y lo comparan con el famoso 'poppy', la amapola que se luce en el Reino Unido durante el mes de noviembre en recuerdo a los caídos británicos en la Primera Guerra Mundial.

En su último partido disputado, durante la victoria del domingo contra el Chelsea (1-0), el rival del Barça en la Champions, Guardiola no lució de forma visible el lazo amarillo, aunque lo llevaba encima tal como él mismo afirmó que lo llevaría siempre fuera o no visible. En la solapa tenía un narciso de color amarillo en apoyo a la Fundación Marie Curie contra el cáncer.