Si por algo destaca Florentino Pérez es por ser el protagonista de desembolsar grandes cantidades de dinero por grandes fichajes. Sin ir más lejos, suyo fue el Real Madrid de los galácticos. Ha emprendido incorporaciones de leyenda que han permitido al conjunto blanco gozar de algunos de los mejores jugadores del mundo.
Pero no todo es perfecto. Hasta los mejores se equivocan y Florentino, es humano. También ha despilfarrado dinero en fichajes que parecían ser una cosa, pero luego fueron otra. Eden Hazard, por ejemplo, llegó al Santiago Bernabéu por 178 millones de euros en 2019 y, a día de hoy, nadie pagaría un duro por él. Aunque, no es el peor fichaje de la era Florentino.

30 millones a la basura
Se trata del caso Reinier Jesús. El futbolista llegó en 2020, después de incorporar a Vinícius Júnior y a Rodrygo Goes. Desde Brasil convencieron a Florentino que Reinier sería una futura estrella y que era el complemento ideal de los dos nuevos fichajes del conjunto blanco.
Mentira. A Florentino lo engañaron. Pagó 30 millones por un futbolista que no había demostrado absolutamente nada. 30 'kilos' que está demostrado que se tiraron a la basura. A su llegada, el centrocampista, ahora cedido en el Girona, se le inscribió directamente para jugar en el filial, los técnicos del primer equipo ni siquiera se fijaron en el brasileño.

Ya en el Real Madrid Castilla, a las órdenes de Raúl González, el de Brasilia tampoco destacó, solo disputó 3 partidos, a causa de contraer el Covid. Así pues, el club lo envió al Borussia Dortmund, en forma de cesión, para que se fogueara y volviera siendo un futbolista hecho, pero la jugada salió rana, se estancó.
El Real Madrid le busca salida
2 años estuvo en la Bundesliga, donde solo jugó 20 partidos en los que anotó 1 solo gol y repartió 1 asistencia, un bagaje muy pobre para un futbolista de su supuesta calidad. Durante su estancia, por el Borussia pasaron 3 entrenadores y no convenció a ninguno, casualidad no es.

Este verano volvió al Real Madrid, pero tenían claro que no iban a contar con él, así que de nuevo una cesión, al Girona. Se esperaba que el brasileño despuntara en Montilivi, pero de nuevo, decepción. 1 gol y ninguna asistencia a las órdenes de Michel y 343 minutos jugados. Números ridículos.
A final de temporada regresará al Santiago Bernabéu, pero Florentino ya ha perdido la paciencia. El club buscará desprenderse de él y tratará de encontrar algún equipo que esté dispuesto a quedárselo. A su favor, juega que solo tiene 21 años, pero en el Real Madrid ya no tiene crédito.