A Hans-Dieter Flick se le ha acabado por completo la paciencia, y quiere perder de vista a los jugadores que no entran en sus planes. Porque la operación salida está siendo mucho más lenta de lo previsto, y hasta el momento tan solo se han certificado las despedidas de Pablo Torre y de Anssumane Fati, además de las de Clément Lenglet y Álex Valle, si bien ninguno de los dos estuvo a sus órdenes durante la anterior campaña, ya que se encontraban a préstamo en otros clubes.
Todavía hay muchas piezas que están obligadas a dejar el Barça, pero las cosas se han complicado más de lo esperado. Joan Laporta y Deco no encuentran soluciones, y los descartes no están ayudando, ya que tampoco están buscando un nuevo equipo, e incluso amenazan con quedarse y respetar el contrato que tienen firmado. Y uno de los grandes dolores de cabeza que existen en estos momentos tiene nombre y apellido: Iñaki Peña.
Desde que tuvo una fuerte discusión con el entrenador alemán, en la ida de semifinales de la Supercopa de España, tan solo volvió a jugar en caso de extrema necesidad, para dar descanso a Wojciech Szczęsny. Y las cosas solamente pueden ir a peor para el internacional español, ahora que Marc-André ter Stegen ya está recuperado de su grave lesión, sin olvidarnos del fichaje de Joan García, que ha llegado desde el RCD Espanyol.
El ex del Villarreal y del Galatasaray turco tuvo un acto de indisciplina que Flick nunca le ha perdonado, y tuvieron una fuerte discusión que acabó en un divorcio total y definitivo. Porque el guardameta nacido en el año 1999 recriminó al entrenador que no tenía el mismo trato con todos los miembros de la plantilla, una acusación que no le hizo ni pizca de gracia, y que provocó que su futuro en el Camp Nou quedara totalmente sentenciado.
A pesar de que negociaba la ampliación de su vínculo en ese momento, Laporta y Deco paralizaron las conversaciones, y colocaron el nombre de Iñaki en la lista de transferibles. Pero aún no han llegado novedades…
Flick exige una solución inmediata a Laporta
Lógico que Flick esté totalmente desesperado, ya que en estos momentos tiene cuatro porteros a su disposición, y dejó muy claro que tan solo quería tener a dos. Y la gira asiática comienza en cuestión de unos pocos días…
En el Barça existe un problema más que evidente, que debe de solucionarse muy pronto.