A nadie se le escapa que Gerard Martín fue una de las primeras apuestas personales de Hans-Dieter Flick poco tiempo después de haber sido anunciado como nuevo entrenador del Barça. De manera sorprendente, decidió confiar en él para ocupar el lateral izquierdo, y ser el principal recambio de Alejandro Balde, aunque Álex Valle también dejara muy buenas sensaciones durante la pretemporada, si bien se decantó por el ex de la UE Cornellá.
Esto obligó al defensor nacido en el año 2004 a tener que salir del Camp Nou, primero a préstamo al Celtic de Glasgow, y después, traspasado definitivamente al Como de Cesc Fábregas. Y fue una decisión que le costó muchas críticas al técnico alemán, ya que creían que lo mejor era confiar en un futbolista que se había formado en La Masía, y que era más joven y tenía más proyección que el ’35’, quien dejó muchas dudas con sus primeras actuaciones.
Por suerte, el tiempo acabó dando la razón a ‘Hansi’, ya que fue mejorando con el tiempo, y acumulando experiencia. Y acabó la campaña sorprendiendo a todos con su fantástico nivel y su regularidad, mostrando mucha más confianza en sí mismo, y firmando una serie de actuaciones realmente destacadas. Así que también tuvo la recompensa de ser convocado para disputar el Europeo sub 21, y vestir por primera vez en su vida la camiseta de la selección española.
Desgraciadamente, sufrió una lesión que le ha impedido poder ejercitarse con normalidad durante la pretemporada, y que ha provocado que no pueda estar al 100%. Y es una oportunidad que una joya de la cantera, Jofre Torrents, ha aprovechado para demostrar a Flick que está preparado para jugar en el primer equipo. Es una de las grandes sensaciones actualmente en el Barça, donde están convencidos de que puede ser una estrella mundial.
Por lo tanto, para Martín será complicado tener minutos, y Laporta y Deco se habían mostrado dispuestos a estudiar las ofertas que llegaran por él, siempre y cuando rondaran los 10 millones de euros.
Flick encuentra una manera de salvar a Gerard
Sin embargo, Flick está muy satisfecho con la actitud y el compromiso de Gerard, y desea seguir teniéndolo a sus órdenes, aunque sea para tener un papel totalmente secundario.
Y tiene intención de utilizarlo en otra demarcación, como la de central, donde cree que puede encajar perfectamente gracias a sus condiciones y su envergadura.