La Federación de Asociaciones de Vecinos y Vecinas de Barcelona (FAVB) ha denunciado que el futuro Espai Barça "no cumple la legalidad urbanística", en las alegaciones presentadas hoy a la Modificación del Plan General Metropolitano (MPGM) que tiene que dar paso a las nuevas obras blaugrana.

En rueda de prensa, la presidenta de la FAVB, Ana Menéndez, se ha quejado de que es un proyecto que, "con el pretexto de ampliación del equipamiento deportivo, aprovecha para colocar 30.000 m² nuevos para oficinas y un hotel".

Esta es una de las principales quejas de las asociaciones de vecinos, que alegan que el proyecto del Barça "no demuestra el interés público por encima del privado" y "no es beneficioso para la ciudad", ni tiene compensación porque parte de la zona verde que se propone ya es pública.

"Reconocemos que el Ayuntamiento y el club han hecho un esfuerzo en esta nueva propuesta que no pretende el mismo aprovechamiento que proyectos anteriores, pero sigue siendo un proyecto sin beneficios para la ciudad", ha dicho Menéndez, que ha dejado claro que las alegaciones son una "enmienda a la totalidad".

La FAVB considera que "el proyecto del Barça tiene que ser compartido con la ciudadanía" y "ha pedido al Ayuntamiento" que "haga uno 'reset' y trabaje sobre una propuesta participada".

Aunque los vecinos han presentado alegaciones a la Modificación del Plan General Metropolitano, el consistorio no está obligado ni a responder ni a incluir las reclamaciones de los vecinos. La FAVB cree que "en absoluto" es necesaria la modificación y que si se hace es para facilitar la creación de los 30.000 m² para el Barça.

Según el asesor urbanístico de la asociación, Ferran Navarro, el proyecto "no cumple la legalidad urbanística" porque "cualquier modificación del Plan General tiene que justificar que da respuesta a los intereses públicos" y la compensación, en este caso, "no se hace con los terrenos del mismo promotor, sino con terrenos públicos".

"Es un engaño urbanístico calificar como zonas verdes áreas que no lo son", ha lamentado Navarro, que cree que es "insultante para el ciudadano". Los vecinos también se quejan de las afectaciones en la calle Juan XXIII, que según han explicado, tendrá un solo carril por cada sentido y "se verá afectada la movilidad y la seguridad de los ciudadanos".

El proyecto tendrá que afrontar la aprobación provisional del pleno municipal en otoño y, si la supera, se elevará a aprobación definitiva a la Subcomisión de Urbanismo de Barcelona, órgano dependiente de la Generalitat.

La propuesta prevé la construcción de un hotel de 150 plazas, dos edificios de oficinas, locales de restauración, un aparcamiento subterráneo con capacidad para autocares y otro al aire libre para los días de partido, que suman 30.000 metros de techo.

La modificación del Plan Metropolitano también propone cambiar la ordenación de todo el sistema viario, reordenar el acceso rodado y de peatones en todo el ámbito y cambios en la movilidad para mitigar el impacto en días de partido de la afluencia masiva de visitantes.