Ferrari ha vivido un campeonato de Fórmula 1 de lo más peculiar. Il cavallino rampante ha estado metido en una constante montaña rusa durante el transcurso de un mundial en el que no iniciaron de la mejor forma posible. Los problemas de fiabilidad del SF-23, sumados a la alta degradación de neumáticos, supusieron que los de Maranello consagrasen uno de los peores arranques mundialistas de su historia. Sin embargo, con el paso de los Grandes Premios, los italianos conseguían salir del atolladero.
En el equipo rojo, el objetivo, una vez era conocido por todos el dominio apabullante de Red Bull, era ser el mejor equipo de la 'otra liga', la que disputan el resto de escuderías, sin tener en cuenta a los de Milton Keynes. Ahí, los de Maranello, han vuelto a fracasar. Si bien es cierto que Carlos Sainz ha sido el único piloto de otra marca que no sea Red Bull en conseguir una victoria, los italianos han pecado de irregularidad y de una clara falta de ideas en cuanto a estrategia de carrera.

Ferrari juega con Carlos Sainz
No obstante, lejos de agachar la cabeza, reconocer sus errores, y los grandes aciertos del piloto madrileño que, al final, ha acabado por detrás de Charles Leclerc, tras dos últimas carreras para el olvido, en Ferrari creen que el problema es de su piloto. De hecho, hay muchas evidencias de la poca confianza que profesan respecto a Sainz, todo lo contrario al monegasco, a quien desde el muro siempre tratan de favorecer con sus estrategias de carrera.
Un hecho que se ha visto también a la hora de renovar los contratos de ambos, ya que acaban su vinculación a finales de 2024. Desde Maranello han asegurado, por activa y por pasiva, que van a priorizar a il predestinato, como así lo llaman, por encima de Carlos. Además, según apuntan las últimas informaciones, la oferta presentada por Ferrari a Leclerc, deja en muy mal lugar al español, y es que las diferencias entre ambas son asombrosas.

Por si fuera poco, la mítica scuderia está jugando con el madrileño. La única intención de los italianos es asegurarse la continuidad de Sainz hasta 2025, con el único propósito de dejarlo sin asiento ese mismo año, cuando un gran número de pilotos acaban contrato con sus escuderías, siendo Lando Norris, de McLaren, el objetivo principal.
En Ferrari sueñan con Max Verstappen
Sin embargo, el gran sueño de Ferrari, del que se ha hablado, y mucho, siempre ha sido Max Verstappen, una opción que no descartan en Maranello. Y aunque a día de hoy es algo totalmente impensable, ya que el neerlandés tiene contrato con Red Bull hasta 2028, es una posibilidad que genera mucha ilusión en la scuderia, en lo que sería una dupla de oro junto a Charles Leclerc.

"Los diez jefes de equipo estarían encantados de tenerle, pero creo que tiene contrato hasta 2045", dijo Frederic Vasseur en una entrevista a La Gazzetta dello Sport sobre la posibilidad de darle un asiento a Verstappen. Evidentemente, lo de 2045 es una exageración para referirse a que en Milton Keynes tienen blindado a uno de los mejores pilotos.
Sin embargo, en 2028, ya con Verstappen con 31 años, podría optar por un cambio de aires, y Ferrari siempre es una opción muy atractiva por su historia. Una situación que no habrá sentado nada bien a Carlos Sainz que sabe que tiene todos los números para abandonar el equipo si eso sucede, incluso mucho antes.