El FC Barcelona deberá esperar para poder jugar un partido en el Camp Nou. A pesar de que tanto el club como el Ayuntamiento de Barcelona coinciden en la voluntad de reabrir el estadio tan pronto como sea posible y desde la entidad deportiva se da por hecho que se cumplen todos los requisitos y el retorno es inminente, desde el consistorio no se ve de la misma manera. “A día de hoy, todavía hay deficiencias”, han asegurado fuentes municipales este martes por la tarde, horas después de que desde el club se asegurara de que el Spotify Camp Nou “es un estadio muy y muy seguro”, de manera que todavía no hay disponibilidad para otorgar la necesaria licencia de primera ocupación que permitiría disputar partidos con un aforo de 27.000 espectadores.

Para el Ayuntamiento de Barcelona todavía no se dan las condiciones necesarias para otorgar esta primera licencia de ocupación parcial para dar por acabada la primera fase de obras que permitiría utilizar el terreno de juego, así como el gol sur y la tribuna. De momento, desde el gobierno municipal se señala que las deficiencias más importantes tienen que ver con cuestiones de seguridad y evacuación del estadio, entre los cuales se han detallado problemas en “el recorrido de evacuación”, con circunstancias como “el no cumplimiento de la anchura de las salidas para el vaciado del campo” así como “barandillas que no miden la altura necesaria o señalización confusa”. También se han señalado deficiencias con respecto al “recorrido de los vehículos de emergencia”, que de momento “no pueden circundar todo el ámbito del estadio”.

El Ayuntamiento devuelve la pelota al club

En esta situación, después de que desde el club se ha insistido en que en cuanto al retorno al estadio, la pelota estaba en el tejado del Ayuntamiento, el consistorio devuelve ahora esa pelota apuntando que todo depende del club, que es que tiene que "corregir las deficiencias detectadas”. Una vez estén corregidas, los plazos pasarían por una “inspección in situ” para comprobar que se han resuelto las deficiencias, y en caso positivo, se podría otorgar la licencia de primera ocupación, que permitiría que en un plazo de veinticuatro horas el FC Barcelona ya tuviera el visto bueno municipal para retornar al Camp Nou. 

Además, desde el consistorio han asegurado de que se trata de la obra más importante que hay en la ciudad y que cada viernes hay una reunión de coordinación entre las dos partes para dialogar sobre los problemas que van surgiendo, como se ha hecho desde el inicio de las obras, además de señalar la especificidad de que este primer retorno al Camp Nou no significa el final de las obras que aún se alargaran dos años mínimo.

La primera teniente de alcaldía, Laia Bonet, ha expresado que desde el Ayuntamiento de Barcelona se “comparte” con el Fútbol Club Barcelona “que el retorno sea un éxito y sea lo antes posible,” pero a partir de condicionantes que todavía no se cumplen. “El Ayuntamiento de Barcelona debe garantizar la seguridad de los aficionados, de todas las personas que quieren acudir al estadio”, ha afirmado Bonet, para añadir que el consistorio “tiene que velar para que los técnicos municipales puedan trabajar desde el rigor”. “No tardaremos ni un minuto más del necesario para dar la licencia de primera ocupación una vez todos los requisitos se cumplan”, ha insistido Bonet.

Por su parte, el jefe de Bomberos de Barcelona, Sebastià Massagué, ha detallado que entre las deficiencias observadas, “hemos detectado elementos que repercuten sobre la seguridad en torno a las vías de evacuación” y ha insistido en que para “poner el estadio en funcionamiento se tienen que cumplir los requisitos que siempre se informaron”. En esta situación, el Ayuntamiento queda a la espera de que el club resuelva las deficiencias e informe, para así poder abrir activar el otorgamiento de la licencia.

Posible partido en el Lluís Companys

Aunque desde el Ayuntamiento no se ha querido dar ninguna fecha posible de apertura, el hecho es que no hay ninguna garantía de que el FC Barcelona pueda jugar este domingo en el Camp Nou contra la Real Sociedad, y el consistorio no cierra la puerta a que se pueda jugar en el Lluís Companys. Eso sí, en un horario que evite tanto como sea posible coincidir con la celebración del piromusical que cerrará las fiestas de la Mercè y en que la ciudadanía podrá volver a disfrutar del espectáculo de la Font Màgica de Montjuïc.