El consejero delegado de Naturgy, Francisco Reynés, ha defendido y reiterado que revisar el calendario de cierre de las centrales nucleares, alargando la clausura de Almaraz (prevista para 2027 y 2028), teniendo en cuenta que “las otras instalaciones están autorizadas a funcionar como mínimo 10 años”.
En una intervención en el foro World In Progress -organizado este lunes y martes en el Palau de Congressos de Catalunya-, Reynés ha apostado por "revisar todos los objetivos" en 2030, según ha informado la agencia de noticias ACN. El directivo de la primera gasista del Estado ha asegurado que hoy por hoy "en el panorama nuclear no hay nada reversible menos el cierre de Almaraz", que está previsto en 2027 para el grupo 1 y en 2028 para el grupo 2. Según Reynés, teniendo en cuenta que el resto de centrales nucleares están autorizadas a funcionar "un mínimo de 10 años", debería poder funcionar, también Almaraz, 10 años más y entonces revisar los objetivos.
Según el directivo, se debe apostar por una descarbonización “progresiva”. En este sentido, ha manifestado que en 2030 se deberían “volver a hacer los números” y “revisar los objetivos” teniendo en cuenta los acontecimientos que ahora se conocen y que no se sabían en 2019 cuando se pactó el calendario.
El hidrógeno, caro a corto plazo
Asimismo, ha reiterado que producir sobre la base de hidrógeno verde es el futuro de la industria eléctrica, pero ahora mismo no se dan las condiciones para hacer viables las inversiones, ya que requiere “sobrantes de energía eléctrica que no tenemos”. Por eso, ha dicho que es necesario “utilizar todo lo que haya disponible” incluyendo el almacenamiento de carbono y para combustibles y gases naturales que tienen neutralidad de emisiones de CO₂. “Si la energía es cara, no se producirá (...) avancemos hacia la descarbonización todo lo rápido que podamos, vayamos al objetivo final que es el hidrógeno, pero no evitemos otras opciones tecnológicas disponibles que son más baratas a corto plazo”, ha dicho.
En su intervención en dicho foro, el consejero delegado de Naturgy también se ha referido a los precios de la energía. En este sentido, ha manifestado que los contratos a largo plazo con los países productores de gas son la solución para dar “estabilidad a los precios de venta”. Reynés ha recordado que el 53% de las reservas de gas están en Estados Unidos, en Rusia, en China, en Qatar y en Omán. “Cuando una empresa se compromete a un contrato de 30 o 40 años, debe haber seguridad jurídica de que el contrato se pueda cumplir y que no existan condiciones que generen inestabilidad en los precios, que están expuestos a mercados volátiles”, ha dicho. En este sentido, Reynés ha abierto la puerta a incrementar costes energéticos para encarar la descarbonización. “El gran reto de la sociedad es entender que las cosas no son gratis”, ha subrayado.