La bolsa española inició el verano con una contundente demostración de fuerza en su política de remuneración al accionista. Las empresas cotizadas repartieron en julio la suma de 7.150 millones de euros en dividendos, lo que supone un vigoroso incremento del 20% respecto al mismo mes del año anterior, según los datos oficiales de Bolsas y Mercados Españoles (BME) recogidos por Europa Press.
Este repunte no es un hecho aislado, sino la continuación de una tendencia alcista. En el acumulado de los siete primeros meses de 2025, los desembolsos suman ya 28.440 millones de euros, un 10,1% más que en el mismo periodo de 2024. Esta dinámica coloca al ejercicio en curso en la senda de superar las expectativas y desafiar los registros históricos, que actualmente ostenta 2024 con un desembolso total de 37.507 millones.
Los analistas coinciden en que la clave para batir el récord se jugará en el último trimestre del año, tradicionalmente el más activo en materia de remuneraciones. "A pesar de la habitual tranquilidad de meses como agosto y septiembre, el cuarto trimestre concentra tradicionalmente pagos masivos. El año pasado se abonaron 11.000 millones en ese periodo. Si se mantiene esa tendencia, 2025 no solo confirmaría su solidez, sino que podría convertirse en el segundo año más generoso de la serie histórica", señala un informe de análisis bursátil.
El mes de julio, crucial por coincidir con la presentación de resultados del primer semestre, estuvo protagonizado por los pagos de gigantes cotizados. Multinacionales como Iberdrola, Repsol, Naturgy, Banco Santander y BBVA lideraron los desembolsos, reflejando la robustez de sus cuentas de resultados. A ellas se sumaron otras como Indra, Redeia, Amadeus, ACS, Acerinox, Rovi y Aedas Homes, que contribuyeron significativamente al volumen total. Este reparto de beneficios coincide con un momento de optimismo en el parqué nacional. El Ibex-35 cerró julio con una subida cercana al 3%, rozando los 14.400 puntos, en un ambiente de confianza inversora que se ve recompensada con estas jugosas retribuciones.
En paralelo al auge de los dividendos, la salud general del mercado se refleja en su capitalización. La bolsa española sumó 30.250 millones de euros en julio (un 2,1% más), hasta alcanzar la cifra récord de 1,416 billones de euros. El crecimiento es aún más notable en perspectiva anual: la capitalización se ha revalorizado un 15% desde diciembre de 2024, lo que equivale a una ganancia de 185.130 millones de euros. El análisis por sectores revela un desempeño dispar:
-Financiero. Fue el gran motor, con una ganancia mensual del 9,5% (+29.000 millones), totalizando 330.265 millones.
-Energético: (Petroleras y utilities) registró un leve retroceso del 0,9% (-1.900 millones), aunque mantiene un avance anual robusto de 32.040 millones.
-Bienes de consumo: Principalmente lastrado por Inditex, cayó un 3,45% en el mes (-5.800 millones).
Los datos de julio pintan un panorama halagüeño para el inversor en la bolsa española. La combinación de una capitalización al alza y unos dividendos en claro crecimiento refuerza el atractivo de las compañías del Ibex-35, sugiriendo una confianza de las propias empresas en sus perspectivas de negocio y su compromiso con la rentabilidad para el accionista. La mirada está ahora puesta en los próximos meses para ver si 2025 consigue, efectivamente, coronarse como un año histórico para las retribuciones.