Con la primavera llega la declaración de la Renta el próximo 11 de abril hasta el 30 de junio, periodo válido para presentar por Internet las declaraciones de Renta y Patrimonio del año 2022. Pero el calendario no acaba aquí. Del 5 de mayo hasta el 30 de junio de 2023, la Agencia Tributaria podrá confeccionar la declaración de cada persona sobre la Renta 2022 por teléfono, una solicitud que se puede tramitar por cita desde el 3 de mayo hasta el 29 de junio. Y del 1 de junio al 30 del mismo mes, la Agencia Tributaria podrá confeccionar vuestra declaración de Renta 2022 presencialmente desde sus oficinas oficinas, mediante una solicitud de cita desde el 25 de mayo hasta el 29 de junio.

📅 Renta 2022: calendario, fechas clave, novedades y borrador

 

A partir de aquí, el colectivo que más cambios tendrá son los autónomos, atados a las últimas reformas del ministro de Inclusión y Seguridad Social, José Luis Escrivá. Especialmente destaca las cuotas por tramos, ligada a la cotización. Los gestores, pero también desde los mismos servicios laborales de las pymes y patronales alertan de los cambios significativos que pueden comportar errores "catastróficos" como ha tildado la misma Hacienda. Precisamente, este trámite es el que más errores suma en cifras globales año tras año.

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Los errores más frecuentes

Para los autónomos, la dificultad que supone cumplir esta obligación fiscal es mayor. Para un asalariado, solo hay que observar el borrador porque incluye la mayoría de los ingresos y los gastos que se han obtenido en el ejercicio anterior. Sin embargo, el autónomo tendrá que recopilar e incluir toda la facturación del año anterior y añadir las deducciones a las cuales tiene derecho. A grandes rasgos, estos son los errores más previstos:

- Entregar la declaración de la Renta fuera de su plazo. Nos tenemos que quedar con una única fecha, la límite de entrega de la declaración de IRPF y es el 30 de junio de 2023.

- Aplicar bonificaciones o deducciones equivocadas. Omitir datos importantes o incluir algunos falsos comporta sanciones. Si la infracción se considera grave, aplicarán un 15% del importe a pagar a la liquidación. En cambio, si se omiten datos importantes o información falsa, la multa son 300 euros.

- Número de identificación fiscal (NIF) equivocado. Si la identificación no se hace de manera correcta con nuestro Número de Identificación Fiscal (NIF), la sanción por parte de Hacienda será de 150 euros, si es leve; un mínimo de 1.000 euros si es grave; o 30.000 euros si es muy grave.

- Tener en cuenta la documentación: menos es más demasiado a menudo. No se pueden aportar facturas, documentos o justificantes que no sean legales con el propósito de obtener un beneficio en nuestra declaración de la Renta superior a 3.000 euros, ya que comporta una multa de entre el 50% y el 100% del importe a pagar. Por otra parte, un gasto deducible es un coste que se puede desgravar fiscalmente. Este se puede aplicar a dos impuestos: IVA o IRPF. No obstante, para que un autónomo pueda llevar a cabo esta acción, tiene que cumplir tres requisitos: los gastos tienen que estar relacionados con la actividad económica o profesional del autónomo; los gastos tienen que estar justificados mediante una factura; hay que registrar los gastos al libro de gastos e inversiones correspondiendo a cada autónomo. Demasiado a menudo, la interpretación lleva a errores y, en este punto, es clave la figura de un gestor o asesor fiscal.

- No ir en contra de la Agencia Tributaria si no se tiene la seguridad absoluta. En caso de impedir el trabajo de la Agencia Tributaria a la declaración de la Renta no aportando documentación solicitada en una comprobación de datos, el contribuyente puede recibir multas de entre 150 y 600 euros.

La obligación de todos estos aspectos es extensiva prácticamente a todo el colectivo ya que los que se entregan son personas que no tienen sujeto su vida económica a esta condición. La mayoría de trabajadores por cuenta propia están obligados a presentar la declaración de IRPF anual, ya que el límite establecido para el colectivo es haber obtenido más de 1.000 euros de beneficio en el 2022. Y, incluso, en este caso los asesores fiscales recomiendan hacerla para evitar confusiones.

En paralelo, la Agencia Tributaria ha publicado un extenso manual práctico en que detalla todos los aspectos que los autónomos tienen que incluir a su declaración de la Renta 2022 para calcular los rendimientos netos a incluir a la base imponible. Incluso, en función del tipo de régimen de cotización de los trabajadores por cuenta propia.