De momento, en todo el mundo funcionan ya ordenadores cuánticos en países como Estados Unidos, Alemania, China, Holanda, Japón, Canadá y Corea del Sur. En España, está en proyecto la instalación en el Barcelona Supercomputing Center de otro dispositivo de este tipo en 2025, en Galicia hay también un proyecto en marcha y, ahora, el País Vasco anuncia que tendrá el suyo en San Sebastián un año antes: en 2024. Costará 120 millones de euros, según ha informado el Gobierno Vasco.

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¿Qué son los ordenadores cuánticos?

El fundamento a partir del que se desarrollan estos dispositivos informáticos es el principio de superposición de la materia que, a través del entrelazamiento cuántico, permite desarrollar una computación distinta a la tradicional que, en teoría, sería capaz de almacenar muchísimos más estados por unidad de información y operar con algoritmos mucho más eficientes a nivel numérico. Así, los ordenadores cuánticos aprovechan la mecánica cuántica, que es la rama de la física que estudia las partículas atómicas y subatómicas, para superar las limitaciones de la informática clásica. Entre otras cosas, y siempre en teoría, permitirán realizar multitud de operaciones simultáneas y eliminar el efecto túnel que afecta a la programación actual en la escala nanométrica.

En la informática cuántica, la unidad básica de información ya no es el bit, que queda sustituido por el qubit, el cual admite la superposición coherente de unos y ceros, los dígitos del sistema binario que fundamentan toda la computación. El bit, por el contrario, sólo puede adoptar un único valor al mismo tiempo. La multiplicidad de estados (un qubit puede ser cero y uno a la vez y, además, serlo en distinta proporción) permite que un ordenador cuántico de 30 qubits pueda realizar hasta 5,8 billones más de operaciones por segundo que la consola PlayStation más potente del mercado.

Además, la computación cuántica no dispone de código propio para programar y requiere del desarrollo de algoritmos específicos. Los lenguajes estandarizados actuales (Java, SQL o Python) no sirven aquí. Todo ello hace que los ordenadores cuánticos no sean herramientas para el uso cotidiano y se desarrollen sólo unidades para usos corporativos, científicos y tecnológicos. Con todo, hace 80 años los primeros ordenadores tampoco eran aptos para usos domésticos.

¿Qué plantean ahora en San Sebastián?

El ordenador cuántico que ahora anuncian para el País Vasco lo construirá IBM y se instalará en el Centro de Computación Cuántica del País Vasco. Se llamará System One e incluirá un chip Eagle de 127 qubits. No se trata, admiten los promotores del proyecto, del hardware cuántico más avanzado de IBM, pero sí que va a suponer un salto de gigante para la computación cuántica en España. En Barcelona, está previsto otro ordenador, éste de 30 qubits, que empezará a funcionar en 2025 en el Barcelona Supercomputing Center y en Galicia han encargado a Fujitsu que construya otro, con 32 qubits, que podría estar listo a finales de este año. Alemania, Chequia, Francia, Italia y Polonia también proyectan los suyos, pero en España, según todo indica, parece que acabará habiendo uno por cada Comunidad Autónoma.