A estas alturas no sería de extrañar que estuvieras un poco cansado con tanto bombardeo con la próxima llegada del 5G. La guerra entre EE. UU. y China por su control, los nuevos dispositivos que ya comienzan a fabricarse y comercializarse con la conexión ultrarrápida que aporta, su llegada a Barcelona… El 5G está por todas partes pero no parece que todos tengamos del todo claro qué nuevas aplicaciones traerán en los próximos años. Se prevé que las conexiones 5G sean una realidad en 2021 para un número entre 20 y 100 millones de usuarios, y ese será solamente el comienzo de una auténtica revolución que superará en mucho el paso del 3G al 4G que vivimos hace unos años.

Vamos a dar un pequeño repaso sobre algunos de los usos que, sin duda, van a cambiar bien pronto gracias a la llegada del 5G.

Cirugía remota

La baja latencia (es decir, el escasísimo e inapreciable tiempo de respuesta) del 5G permitirá a los cirujanos operar a pacientes a miles de kilómetros de distancia mediante el uso de robots. La cirugía remota proveerá servicios de salud y cuidados de alta calidad a personas que vivan en áreas rurales o apartadas, algo impensable hasta ahora.

Los cirujanos podrán operar desde su propia consola allá donde estén y utilizar guantes calibrados para guiar brazos robóticos a través de procedimientos apenas invasivos.

Mejor gestión sanitaria

Los wereables asociados al 5G permitirán a los pacientes monitorizar y manejar sus enfermedades en tiempo real. La telemedicina se volverá más previsora en tanto en cuanto los médicos serán cada vez más capaces de hacer diagnósticos robustos remotamente.

Los pacientes podrán tener citas con doctores mediante vídeo en alta calidad y tiempo real y recibir las prescripciones necesarias al instante. Los técnicos de laboratorio podrán enviar imágenes obtenidas durante resonancias magnéticas o escáneres a los especialistas justo después de que los pacientes dejen de haberlos utilizado.

Integración en el Internet de las Cosas

El internet de las cosas se refiere a los objetos físicos que están capacitados de estar conectados a internet y a la comunicación entre ellos y otros sistemas. Los estudiantes podrán, por ejemplo, utilizar un subrayador inalámbrico para escanear información de sus libros de textos o apuntes y enviarlos inmediatamente a formar parte de los textos de un archivo Word en su ordenador.

Tu frigorífico podrá ofrecerte sugerencias de recetas y permitirte chequear qué es lo que queda dentro de él de forma remota e instantánea, para saber cuando tú quieras qué tienes en casa y qué necesitas comprar.

Los centros escolares mejorarán su eficiencia energética y reducirán sus costes gracias a que tendrán su equipamiento perfectamente interconectado y optimizado a las fuentes de las que dependen.

Un mundo rural sostenible

Los granjeros podrán equipar a su ganado con collares conectados mediante 5G para recibir actualizaciones sobre su salud, dieta y comportamiento en tiempo real. Esa información podrá ser enviada a veterinarios y nutricionistas que determinarán si los animales gozan de buena salud.

La automatización permitirá que la producción agrícola sea más eficiente a base de producir más alimentos con menos terreno y recursos físicos adicionales.

Vehículos conectados

Los coches se podrán abrir y cerrar mediante sistemas de autenticación web, de tal manera que el smartphone y el smartwatch remplazarán por completo el sistema tradicional de llaves.

Los conductores de coches eléctricos podrán utilizar los datos 5G en su panel de control para monitorizar los niveles de batería de forma remota y buscar asimismo y en cualquier momento estaciones de recarga donde poder repostar.

La tecnología 5G permitirá incorporar la tecnología V2X (comunicación del vehículo a cualquier fuente), proveyendo a los conductores una información totalmente precisa del tráfico tan real como instantánea.

Los vehículos autónomos se podrán programar desde un centro de mandos, optimizando así su desempeño y reduciendo el tráfico en las carreteras.

Juegos más inmersivos

Las conexiones de alta velocidad serán un auténtico progreso para que el juego online y los e-sports se conviertan en modalidades realmente inmersivas para los participantes.

Los desarrolladores de consolas de juegos podrán gracias al 5G trasladar el peso de su oferta a suscripciones basadas en servicios en la nube que reduzcan el coste y mejoren notablemente la flexibilidad como usuario.