Esta semana el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya ha ordenado a Educació que ejecute de manera inmediata la sentencia del 25% de castellano en las aulas. En concreto, la justicia da un plazo de 15 días a la Generalitat para que la norma sea efectiva en las escuelas, una decisión que el Gobierno ya ha recurrido. Pero, más allá de las injerencias del Estado español y sus tribunales al sistema educativo de Catalunya, ¿qué presencia real tiene el catalán en el ámbito educativo?

 

Según el último informe del Síndic de Greuges, el castellano ya es la lengua vehicular en las escuelas catalanas con un 33%, ya que, aunque no es mayoritario en las aulas sí que lo es en otros ámbitos escolares. El 53% de niños y adolescentes hablan en castellano en el ámbito familiar; en el de las amistades, un 65%; en el de las redes, un 59%; en el del consumo audiovisual, un 73%; en el consumo literario, un 55%; en el ocio, un 52% y en el deporte un 55%. En cambio, el catalán sólo gana en el comedor (a pesar de que sólo a primaria) y en las aulas, donde el uso es del 64%.

Es por eso que el Síndic ya alertó a marzo que la lengua española gana terreno y es cada vez más vehicular, lo que significa que si la sentencia del 25% se acaba aplicando, disminuirá con creces este porcentaje en las aulas. Además, asegura que el uso del castellano como lengua vehicular es más habitual por los profesores donde hay un entorno mayoritariamente castellanohablante, y los profesores acostumbran a impartir más materias en catalán cuando el entorno es catalanohablante. Es más: en los patios catalanes el catalán tiene sólo una presencia de 43%.

¿Qué pasará ahora?

¿Dará instrucciones el conseller Josep Gonzàlez-Cambray a las escuelas para que hagan efectivo el cumplimiento del 25% de las clases en castellano en las aulas catalanas? El responsable de Educación ha asegurado que las escuelas no tendrán que hacer ningún cambio, y que la conselleria presentará un recurso de reposición al auto del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya.

Más allá de eso, Cambray ha recordado que están trabajando en un decreto para dar cobertura jurídica a las direcciones y a los maestros de las escuelas para salir adelante los proyectos lingüísticos, desde la perspectiva de que a estas alturas no hay suficiente catalán en las aulas: "Los próximos años habrá más catalán a raíz de este decreto que nos afianza", ha asegurado, y ha recordado que el aprendizaje de lenguas no puede ir de porcentajes sino de pedagogía, y que el objetivo es que cuando los alumnos acaban cuarto de la ESO tengan los conocimientos de catalán, castellano e inglés adquiridos.