La Associació Catalana de Recursos Assistencials (ACRA) advierte de que Catalunya necesitará 80.000 nuevas plazas residenciales y 26.000 profesionales más de aquí a 2035 para hacer frente al envejecimiento de la generación del baby-boom. Según un estudio socioeconómico de la entidad, actualmente hay 63.213 plazas en residencias y más de 18.000 personas esperando una, una situación que atribuyen al déficit de financiación y a la falta de oferta. El informe de ACRA avisa de que el crecimiento anual de personas mayores se doblará en los próximos años en el Estado español, con un incremento anual del 2,48% por la llegada del baby-boom a la tercera edad. Además, Catalunya, con otras comunidades como Andalucía, la Comunidad de Madrid o el País Valencià, es de las que más personas mayores tiene en cifras absolutas por la elevada densidad de población. Según el informe, las personas mayores de 80 años representarán el 6% de la población, pero la cifra se elevará al 7,11% en 2035 y al 10,05% en 2050.
La presidenta de ACRA, Cinta Pascual, ha alertado de que las residencias viven “uno de los momentos más difíciles” desde la pandemia por la falta de enfermeras y auxiliares, que a menudo prefieren trabajar en el sistema sanitario público por las mejores condiciones laborales. La entidad reclama un convenio único para retener a los profesionales y pide agilizar la homologación de títulos extranjeros. ACRA también denuncia que la integración sociosanitaria “no está funcionando” y que algunos CAP no dan servicio a las residencias. Pascual defiende que la atención a las personas mayores es una “responsabilidad compartida” con el sistema sanitario y reclama más presencia de médicos y enfermeras en los centros.
Atención domiciliaria
Ante las necesidades por el envejecimiento de la población, una de las opciones que plantea la entidad es alargar al máximo la estancia en casa. El informe indica que la oferta de atención domiciliaria en Catalunya atiende a 67.316 personas, con un índice de cobertura del 4,3% para mayores de 65 años en 2023. Se trata de un porcentaje inferior al estándar europeo, que se encuentra en el 10,1%. La presidenta de ACRA ha considerado que la atención domiciliaria es una buena opción, pero ha alertado de que la “preocupación” es sobre la cobertura social en casa. En Catalunya la media de horas de atención en el domicilio es de unas cuatro a la semana, mientras que en comunidades como Andalucía se eleva por encima de las 10. Así, para ACRA se deberían ampliar las horas y “esto significa financiación también”, ha alertado su presidenta. Pascual también ha planteado que es necesario legalizar a las cuidadoras que están en situación administrativa irregular si se demuestra que hace tiempo que cuidan a personas mayores. “¿Por qué no las legalizamos, les damos papeles y pueden cotizar y trabajar con papeles y pagar impuestos?”, se ha preguntado.