Muchos han oído hablar de Chernóbil. Otros, han sabido poner imágenes y cara al accidente nuclear más importante de la historia con la seria de HBO. Sin embargo, ¿qué pasará ahora? La ficción de Chernobyl ha disparado las visitas al lugar de los hechos. Ahora son miles los curiosos que quieren experimentar como es la ciudad fantasma de Prípiat, la más próxima a la central.

De esta manera, la agencia de viajes SoloEast registró una subida del 30% de llegada de turistas durante el mes de mayo con respecto al 2018, según informa Reuters. Las reservas para junio, julio y agosto han subido hasta el 40% desde el estreno de la serie. Los tours cuestan, de media, unos 100 dólares por persona. Y tal como muestran a través de vídeos, la visita incluye un tour por la ciudad e incluso, en la central.

Prípiat se ha quedado igual que la dejaron sus habitantes en 1986. Allí se respira URSS. Con el accidente nuclear, se trazó un área de más de 4.000 kilómetros cuadrados conocida como Zona de Exclusión. Todas las comunidades situadas dentro de un radio de 30 kilómetros en torno a la planta estuvieron desocupadas y abandonadas. Los habitantes de la ciudad no sabían que ya no volverían nunca más a sus casas. Los objetos, los edificios, todo estaba colocado esperando a que alguien volviera. Pero no fue así.

Hoy día, todavía está prohibido vivir allí, aunque algunas personas dispusieron de una autorización especial para volver. Sin embargo, la ciudad se ha convertido ahora en un negocio para las agencias de viajes. ¿Qué incluyen los tours? Los turistas salen con autobuses desde Kiev hasta Chernóbil, recorren unos 120 kilómetros para ver los monumentos a las víctimas y los pueblos abandonados. Según Reuters, también comen en el único restaurante de la ciudad y visitan en reactor número cuatro, donde se produjo la explosión, y visitan la ciudad, donde vivían a 50.000 personas que trabajaban principalmente en la central.