El desierto del Negev se sitúa a unos 90 kilómetros en el sur de Tel Aviv, y ocupa el 60% del territorio de Israel (13.000 km²). Es considerado una de sus grandes maravillas, y no es de extrañar.

Es una zona con una belleza diferente, que esconde paisajes fascinantes y lugares históricos, además de hallazgos arqueológicos y formaciones geológicas únicas que nos invitan a transportarnos siglos atrás.

Adentrarse en esta zona se puede hacer llevando a cabo una larga lista de actividades muy facilitadas gracias a las prestaciones con las cuales cuenta y que le otorgan la palabra de friendly desert (desierto amigable). Es accesible, sus caminos están marcados y son cómodos de recorrer, hay buena cobertura y servicios médicos próximos, además de fuerzas de rescate disponibles durante todo el día.

Caminar Negev

Ruta de senderismo por el desierto de Negev / Turismo Israel

Las mejores opciones para explorar los kilómetros del Negev

Pasar una noche bajo las estrellas es una de las experiencias inolvidables que se pueden hacer en el desierto. El cielo claro, lejos de la contaminación lumínica de las ciudades, lo convierte en el lugar perfecto de Israel para observar los astros.

La mejor opción es empezar viendo la puesta de sol en el punto más alto de Mitzpe Ramon hasta que se haga oscuro y aparezcan las estrellas. Para una experiencia más inmersiva, existe la posibilidad de ser guiado por un experto astrónomo y un telescopio que permita descubrir los secretos de la Vía Láctea y las constelaciones, muy ligadas a la historia judía y los sucesos bíblicos.

Negev noche

Vista de las estrellas desde el desierto de Negev / Turismo Israel

Por otra parte, las excursiones en 4x4 pueden ser una de las mejores opciones para conocer el extenso desierto del Negev, desde las rutas de aventuras por el impresionante Maktesh Ramon, el gran fenómeno natural de Israel en forma de cráter, o descubrir los parajes históricos de Ein Akey y Zin Valley y sus sorprendentes viñedos.

Conectar con el entorno a través del yoga

Sí, el desierto también puede ser un destino para bajar revoluciones, relajarse y conectar con el entorno. Es por esta razón por lo que, cada vez más, en Israel se han popularizado las clases y retiros de yoga y meditación en el Negev, lejos de la vida ajetreada de la ciudad.

La habilidad es indiferente: hay clases para todos los niveles, siempre rodeadas de la calma que desprenden los paisajes rocosos.

Yoga en el Negev 2

Clase de yoga en el Negev / Turismo Israel

Las rutas de senderismo también son una excelente opción, con más de 190 caminos adaptados a los excursionistas de todos los niveles. Hay, por un lado, caminatas cortas y sencillas de 4 kilómetros por Mitzpe Ramon o el Parque Nacional de EIn Avdat, pero también rutas complejas como la de Wadi Baraq, considerada una de las vías más complicadas de Israel, especialmente después de que haya llovido.

Patinar sobre las dunas

Finalmente, los amantes de la adrenalina no pueden dejar de practicar el sandboarding, que consiste en lanzarse sobre una tabla por las pendientes que forman las dunas. Una de aquellas experiencias que se recuerdan toda la vida, y apta tanto para niños como para adultos.

Las mejores dunas para practicarlo se sitúan entre Beersheva y Mitzpe Ramon, donde la arena es más fina y no se engancha.

Sandboarding

Sandboarding sobre las dunas de Negev / Turismo Israel

Imagen principal: noche en el desierto de Negev / Turismo Israel