Abandonados. Los cinco juzgados de Primera Instancia e Instrucción del Prat de Llobregat se han quedado sin el refuerzo de tres magistrados para poder atender la avalancha de reclamaciones de la ciudadanía contra las aerolíneas. Así lo ha resuelto el servicio de Inspección del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) el junio pasado, aunque la sala de gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC), con la presidenta Mercè Caso, ha acordado "reiterar" la necesidad de este refuerzo, según la resolución a la cual ha tenido acceso ElNacional.cat.
Las cifras lo dicen claro, las demandas contra las aerolíneas se elevan a unas 20.000 reclamaciones anuales, que inicialmente colapsaban los juzgados de lo Mercantil de Barcelona, y que desde el 2022 pasó a ser competencia de los juzgados de primera instancia, donde está cada aeropuerto. Los juzgados de Gavà también sufren ser la sede de la compañía Vueling, que acumula bastantes reclamaciones. Los tres magistrados de refuerzo de los juzgados del Prat tenían que asumir unos 180 asuntos sobre transporte aéreo cada mes durante los seis meses del apoyo.
Sin jueces de refuerzo
A pesar de que el Poder Judicial admite que el refuezo es necesario, no ha aprobado su continuidad para los próximos seis meses, ahora que coincide con el inicio de la época veraniega y donde se producen la mayor parte de vuelos durante el año. En su informe, Inspección expone: "La comisión de servicios, cuyo plan de actuación consiste en la tramitación y resolución por cualquier medio, bien sea decreto, acto o sentencia, de un total de 160 a 180 asuntos mensuales sobre transporte aéreo, que ha sido aplicada como una asunción en exclusiva de todos los asuntos de navegación aérea por los tres comisionados, es insuficiente, generándose una importante pendencia en resolución de los tres magistrados comisionados (...) todo eso sin perjuicio que pueda valorarse favorablemente una nueva propuesta de medida de refuerzo que garantice que los comisionados puedan asumir la resolución de los asuntos que le son repartidos."
Por su parte, el TSJC admite que no tiene recursos para prorrogarlo e insiste en que no se abandone a estos juzgados, y que en realidad afectan a los usuarios. Precisa que los jueces de adjudicación territorial están ocupados, y que los juzgues sustitutos, también y que hay otras vacantes pendientes de cubrir en la planta judicial catalana.
Una situación judicial precaria, mientras las asociaciones centroconservadores impulsan el primero de los tres días de huelga contra la reforma que el Gobierno impone para modernizar el acceso a la judicatura e incorporar a la plantilla los jueces que hace años ejercen como sustitutos.