Con el objetivo de reivindicar la declaración de independencia del 27 de octubre de 2017, este sábado ha arrancado la Caminada per la Llibertat, una iniciativa impulsada por entidades de la Catalunya Nord como la ANC nord-catalana, el Consell de la República y la Casa Macià, con la voluntad de hacer visible el papel activo del territorio norcatalán en la lucha por la independencia y la plena soberanía nacional. La marcha ha comenzado en Salses, en la Porta dels Països Catalans, símbolo de entrada al país desde el norte, y recorrerá a pie el territorio hasta el Parlament de Catalunya, donde está previsto que llegue el 27 de octubre a las 16:59, exactamente a la hora en que se aprobó la DUI hace ocho años.

Los organizadores apelan a la “persistencia, la esperanza y el desafío democrático” y reclaman “que cada paso sea una declaración de dignidad”. Con esta caminata simbólica y participativa, se quiere enviar un mensaje claro: “No olvidamos, ni renunciamos”. Los promotores hacen un llamamiento a todos los catalanes comprometidos con la causa nacional a sumarse, para que la Catalunya Nord siga siendo “tierra de resistencia y de futuro republicano”.

La caminata ha comenzado a primera hora de la mañana y pretende ser una expresión de compromiso con la causa independentista y una reivindicación activa del mandato del 1-O. Además de reclamar la independencia, la marcha hace hincapié en la defensa de la lengua catalana como elemento esencial de la identidad nacional y denuncia la inacción de los partidos independentistas desde 2017.

Cartel de la Caminata por la Libertad
Cartel de la Caminada per la Llibertat

La Caminada per la Llibertat recorrerá el territorio catalán en dieciséis etapas consecutivas "para exigir la efectividad de esta declaración", remarcan los organizadores. La primera etapa ha ido de Salses a Baó, con un recorrido de 23,6 kilómetros. La última jornada tendrá lugar el 27 de octubre y culminará con una marcha desde la plaza de Urquinaona hasta el Parlament, donde se ha convocado una concentración a las 11:00. Este acto final coincidirá con el octavo aniversario de la DUI, y quiere convertirse en un clamor colectivo para reclamar su aplicación.

Contra el autonomismo

En el manifiesto que acompaña la marcha, los organizadores definen la Caminada per la Llibertat como “una afirmación rotunda” contra la renuncia al mandato del 1-O y contra el autonomismo. La iniciativa también quiere ser una expresión “pacífica pero firme” de compromiso con la libertad, la justicia y la soberanía del pueblo catalán. El camino, remarcan, no es solo físico, sino también político y emocional, un recorrido por la memoria y la esperanza de un país que quiere ser libre.