De la documentación sobre las pinturas de Sijena que el Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC) ha entregado a Aragón ha aparecido la pista de otra pieza proveniente del monasterio que podría haber salido durante la Guerra Civil y sobre la que el gobierno aragonés ya tiene puesto el ojo. Se trata de la tabla de La Natividad, una pintura gótica que formó parte del retablo mayor del cenobio y que ahora está en manos del Museo del Prado de Madrid. El historiador y perito del caso Sijena para el ayuntamiento oscense, Juan José Nieto, asegura que pudo salir "ilegalmente" del monasterio y el gobierno de Jorge Azcón ya avisa de que si es así lo reclamará también.
Nieto ha afirmado en declaraciones a EFE que, al revisar las fotografías de la sala capitular que hizo al funcionario de la Generalitat de Catalunya José Gudiol al inicio de la Guerra Civil, ha encontrado pruebas gráficas de que la tabla estaba entonces en las estancias del monasterio. "Las fotografías evidencian que la pintura estaba en 1936 en la sala capitular del monasterio porque se ve al lado de unos muros ya rascados por Gudiol, y que, por lo tanto, tienen que ser consideradas como un espolio de guerra, ya que no podían ser vendidas porque Sijena era ya monumento nacional", desde 1923, afirma al perito oscense.
El historiador apunta a la posibilidad de que la tabla fuera trasladada por Gudiol y llegara posteriormente a manos privadas, iniciando un periplo que la llevó en 2023 en una sala de subastas de Madrid, donde fue adquirida por el Museo del Prado por unos cien mil euros —La Natividad forma ahora parte de un conjunto de tablas provenientes de Sijena que se fueron dispersando en el tiempo desde el siglo XVIII y que el museo ha ido reuniendo—. Así, el perito añade que está a la espera de conocer la documentación en poder del Museo del Prado en torno a la tabla para profundizar en el proceso de venta, aunque ha destacado que estos documentos no han salido a la luz todavía.
Juan José Nieto ha instado al ministro de Cultura, Ernest Urtasun, a revisar toda la documentación aportada y la existente en manos del Prado para confirmar o no su hallazgo y para iniciar un proceso para la devolución de la pintura del denominado Maestro de Sijena en el monasterio aragonés. Una petición a la que se ha sumado la Asociación Pro Patrimonium Sixena y Jerusalén, que piden a Urtasun que incluya la tabla en el listado de piezas consideradas "botín de guerra" para su devolución.
"Procederíamos de la misma manera, reclamando"
También se han pronunciado ya desde el gobierno de Aragón. La vicepresidenta aragonesa, Mar Vaquero, ha afirmado este miércoles que si se demuestra que la tabla de La Natividad salió de manera "ilegal" del monasterio de Sijena, Aragón la reclamará como ya ha hecho con las pinturas murales que ha custodiado durante décadas el MNAC y que ahora los tribunales obligan a devolver. Al hilo, la vicepresidenta ha subrayado en declaraciones a los medios que se trata de una información aportada por los técnicos, pero ha avisado de que en caso de que se confirme se reclamará, como ha ocurrido con el resto de bienes que su gobierno considera que deben estar en Aragón. "Procederíamos de la misma manera, reclamando", ha resuelto.
Una tabla del Maestro de Sijena de principios del siglo XVI
La Natividad es una pieza de óleo sobre mesa de unos 1,75 por 1,30 metros que proviene del retablo grande del monasterio de Sijena y que fecha de principios del siglo XVI, de acuerdo con su ficha en el Museo del Prado. La tabla fue pintada entre 1514 y 1519 por el llamado Maestro de Sijena, Rodrigo de Sajonia. La imagen muestra a la Sagrada Familia, con el niño en reposo en el suelo y en primer plano. A los lados, la Virgen y San José, y en el medio un ángel vestido de blanco.