Muchas cosas van a cambiar con el coronavirus en nuestra sociedad, incluso después de la llamada desescalada. Por ejemplo, en el sector turístico. Y las autoridades y expertos sanitarios tendrán mucho que decir a partir de ahora. De hecho, los diferentes organismos turísticos ya se están preparando para lo que está por venir: nuevos protocolos higiénico sanitarios que regularán desde el uso de mascarillas para la atención al público, hasta la distancia entre mesas en un restaurante o entre personas en una playa o incluso la necesidad de desinfectar habitaciones de hoteles y otros espacios.
Todavía se está trabajando en ello desde diversos ámbitos, pero lo cierto es que durante algún tiempo por lo menos, tendremos que acostumbrarnos a otra forma de relacionarnos en sociedad y disfrutar del turismo cuanto toque.
De momento, ya se ha hecho público que el Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE) va a ser el encargado de desarrollar en coordinación con la Secretaría de Estado de Turismo y consensuadamente con el resto del sector, una serie de especificaciones técnicas que permita a los productos y destinos turísticos normalizar la prestación de los mismos una vez finalice el estado de alarma y se inicie la desescalada por parte del Gobierno.
El ICTE es el órgano gestor encargado del fomento y elaboración de normas de calidad en el sector turístico y ya se ha puesto a trabajar en estas especificaciones con el asesoramiento de la Organización Médico Colegial (OMC), la Asociación Española de Especialistas en Medicina del Trabajo (AEEMT) y la Asociación Española de Servicios de Prevención Laboral (AESPLA).
Tal y como advierten los especialistas, la lucha contra el COVID-19 va a ser un largo proceso, por lo tanto, lo que se busca es una herramienta que permita que la apertura de los establecimientos y los destinos turísticos se realice con la mayor seguridad posible, mediante la implantación de una serie de protocolos de seguridad higiénico-sanitarios que garantice la minimización de riesgos frente al coronavirus.
De momento, tal y como informa el ICTE, la elaboración de las especificaciones técnicas se ha comenzado en los subsectores de alojamiento, restauración, playas y balnearios. Constará de una serie de recomendaciones a las que los establecimientos, destinos y productos turísticos se podrán adherir para adoptar una serie de protocolos que intenten prevenir la expansión del virus en estos espacios.
La idea es crear un sello mediante el cual, los turistas tengan claro que el establecimiento o espacio turístico que visiten, cumple con una serie de normas que velen por su salud y seguridad. Un aspecto que, sin duda, va a ser cada vez más demandado mientras no se encuentre cura o vacuna para el COVID-19.