Las personas que tienen un mayor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 conocen bien que deben seguir una dieta equilibrada y reducir el consumo de carbohidratos y azúcares refinados. Pero en algunos casos, y según cómo, la carne también podría incrementar las posibilidades de padecer diabetes.

Un estudio publicado en 2018 en la revista especializada Diabetes Care identificó un vínculo potencial entre el consumo de carne cocinada en contacto con el fuego y a altas temperaturas, y un mayor riesgo de diabetes tipo 2.

Carne a la parrillaCocinar la carne al contacto directo con el fuego, podría incrementar el riesgo de padecer diabetes

Los autores del estudio encontraron que los participantes en el mismo tenían más probabilidades de recibir un diagnóstico de diabetes si comían carne roja o pollo cocido asado al fuego, como en una barbacoa o al grill. Además, los investigadores no descubrieron el consumo de una cantidad de carne que redujera el riesgo señalado. Encontraron que todos los niveles de consumo de carne asada a fuego alto y con contacto con el mismo aumentaron el riesgo de padecer diabetes tipo 2.

Por qué importa la preparación

Las carnes cocinadas de esa manera tienen altos niveles de aminas heterocíclicas. Estas se forman cuando los componentes que se encuentran en las carnes (como proteínas y azúcares) reaccionan a las altas temperaturas. Las carnes bien hechas tienen los niveles más altos de aminas heterocíclicas.

Los investigadores también han vinculado estos y otros compuestos conocidos como hidrocarburos aromáticos policíclicos con un mayor riesgo de padecer cáncer en estudios con animales. Sin embargo, es importante destacar que los científicos no han establecido un vínculo entre los hidrocarburos aromáticos policíclicos y el cáncer en humanos.

Los tipos de carne

Una revisión de estudios llevada a cabo en 2015 identificó una conexión más fuerte entre las carnes rojas procesadas y el riesgo de diabetes. Y entre los ejemplos de carnes procesadas incluyeron las salchichas, los embutidos y las carnes curadas con sal.

SalchichasLas carnes procesadas, como las salchichas, aparecen señaladas en el estudio

El papel de las grasas saturadas

Aunque los investigadores todavía están identificando vínculos entre la carne y el riesgo de diabetes, una creencia común es que los niveles más altos de grasas saturadas y calorías que están presentes en los productos cárnicos están conectados.

También se ha demostrado que consumir una dieta rica en carne aumenta la cantidad de grasa visceral o abdominal. Los médicos asocian niveles más altos de grasa abdominal con mayores riesgos de diabetes. Debido a que los expertos han relacionado la obesidad y el sobrepeso con un mayor riesgo de diabetes, es posible que las grasas saturadas que se encuentran en las carnes, especialmente las rojas, contribuyan al riesgo de diabetes.