Es uno de los ingredientes que poco a poco va entrando en las cocinas de los hogares, pero que todavía cuesta que nos hagamos a la idea de que un elemento tan natural y saludable como las algas, llegue a nuestros platos.
Las algas crecen en el mar o cerca de él. Existen algas de varios tipos y generalmente contienen muchos minerales que el cuerpo puede aprovechar en su beneficio. Algunos de los aspectos de la salud a los que las algas marinas a pueden ayudar son la salud digestiva, la función tiroidea e, incluso, la pérdida de peso.
Algas como el nori, el wakame, el quelpo, el kombu, la espirulina y la chlorella, son algunas de las variedades que cada vez más se van haciendo sitio en la vida de las personas que han descubierto sus propiedades.
Los siguientes son algunos de los beneficios que reportan las algas y que deberías conocer antes de seguir dándoles la espalda.
Son muy nutritivas
No todas las algas cuentan con los mismos nutrientes y minerales. Sin embargo, las vitaminas y los minerales que aportan son considerables, además de ser alimentos que aportan pocas calorías.
A nivel general se puede afirmar que son ricas en proteínas, fibra, minerales, ácidos grasos poliinsaturados, vitaminas A, B, C y E, hierro y yodo. Cuentan con propiedades antioxidantes que protegen al cuerpo humano del estrés oxidativo y reducen la inflamación a nivel celular.
Ayudan en la función tiroidea
La deficiencia de yodo es una causa de hipotiroidismo, un padecimiento que se puede prevenir a base de una dieta que cuente con suficiente yodo. Y precisamente, las algas son muy ricas en yodo y, en especial, el kombu es la que contiene una mayor cantidad de este oligoelemento, seguido del wakame y el nori.
Beneficiosas contra la diabetes
Los alimentos ricos en fibra pueden ayudar ante la diabetes. Esto se debe a que las altas cantidades de fibra ayudan a regular los niveles de glucosa en sangre y los niveles de insulina. Agregar algas marinas a la dieta puede ayudar a aumentar la ingesta de fibra de una persona sin un gran aumento de calorías.
Mejoran la salud intestinal
Las bacterias en los intestinos juegan un papel importante en la descomposición de los alimentos y el apoyo a la digestión y la salud en general. Las algas pueden ser un alimento ideal para el intestino, dado que, dependiendo de la variedad, entre el 25 y 65% de su composición puede ser de fibra. Las bacterias intestinales descomponen la fibra en compuestos que mejoran la salud intestinal y la salud del sistema inmunitario, ayudando en situaciones de estreñimiento o diarrea, por ejemplo.
Sobre la pérdida de peso
La fibra de las algas ayuda a sentirse saciado, pero al mismo tiempo conteniendo muy pocas calorías. Existen estudios que han probado que un gran cantidad de fibra dietética retrasa el vaciado del estómago. Y como consecuencia de esto, el estómago puede no enviar señales de hambre al cerebro durante más tiempo, lo que puede ayudar a evitar comer en exceso.
Protección del corazón
Alimentos tan ricos en fibra como las algas también pueden reducir los niveles de colesterol en la sangre. Estas fibras solubles se unen a los ácidos biliares o sales en el cuerpo. Luego, el cuerpo usa el colesterol para reemplazar estos elementos, lo que puede resultar en una disminución del colesterol total de alrededor del 20 por ciento. Muchos tipos de algas también tienen altos niveles de antioxidantes, que también pueden apoyar la salud del corazón con el tiempo.