Los datos de la pandemia siguen subiendo y, en este contexto, ya se especula con las cenas de empresa. Desde Salut, tanto la secretaria de Salut Pública, Carmen Cabezas, como el conseller Josep Maria Argimon, han constatado que mejor evitarlos.

"Todo hace pensar que será un riesgo importante, aunque no es lo mismo que vayan 150 que 14," constata el jefe de Infecciosas de la Vall de Hebron, Benito Almirante. En conversación con ElNacional.cat destaca que "va muy en función de cuántas personas asisten en este acontecimiento y el sitio". De esta manera, destaca que no es lo mismo "un espacio con poca ventilación o con mucha". A pesar de todo, subraya que "en el momento que estamos y en el momento que estaremos en dos semanas, se asume un riesgo importante".

¿El test de antígenos es una solución?

Las cenas de empresa han repescado otro tema de debate: los tests de antígenos antes de los encuentros. A pesar de tener algunas ventajas también tiene algún inconveniente. Almirante explica que una persona que no tenga síntomas de la enfermedad no dará positivo, pero puede transmitir el virus igualmente. Y en este sentido, expone que no sirve de gran cosa hacerse un test de antígenos 24 o 48 horas antes de la cena de empresa. Para ir bien, habría que hacérselo una o dos horas antes de esta cena. ¿Sin embargo, por qué? Estas 24 o 48 horas podrían ser el periodo de incubación del virus. "Los tests de antígenos tienen mucha validez cuando son positivos. La gente que no tiene síntomas puede ser que dé negativo y tenga el virus".

¿Es posible una Navidad 'segura'?

Lo más importante, según Almirante, "es que se tenga conciencia que el virus está circulando". En este sentido, el jefe de Infecciosas de la Vall de Hebron insiste en la importancia de limitar las reuniones de muchas personas e insistir en las medidas actuales de protección.

Preguntado por si haría falta o no aumentar las restricciones, no es partidario de prohibir, sino de concienciar y convencer en la población. "Las prohibiciones lo que comportan son rechazo y mal uso". Sin embargo, remarca que el año que viene también habrá Navidad, y todo lo que no se pueda hacer este año, se podrá hacer más adelante.

¿Y la variante ómicron, qué?

Científicos de todo el mundo buscan respuestas a las preguntas que plantea la nueva variante del coronavirus, la ómicron. Por ahora, los casos registrados de coronavirus en Sudáfrica suben un 255%. Almirante constata que se han detectado varios casos en 18 países europeos, pero todavía es pronto para hablar de transmisión comunitaria. Ahora bien, para determinar si es o no más transmisible hacen falta más datos porque la variante delta todavía es la predominante en todo el mundo.

Sobre la eficacia de las vacunas tampoco hay respuestas todavía. El motivo principal es que no es lo mismo que se transmita en Sudáfrica que aquí porque la tasa de vacunación es más alta aquí que allí. "Hay que esperar unos meses", remarca.

Ante tanta incertidumbre, sin embargo, una brizna de esperanza. "Lo que es seguro es que aunque esta variante pueda tener resistencia podría tener un efecto positivo. El sistema inmune de las personas lo reconocerá. Las vacunas protegen de la enfermedad grave y la vacuna sigue siendo la herramienta más importante y efectiva para prevenir la enfermedad grave". De momento, no se han registrado casos graves de esta variante y "eso sería una ventaja". "Si la variante de ahora produce mucha infección, pero poca enfermedad es bueno porque convertiría la covid en una enfermedad leve que podríamos superar sin situación especial".

Sin embargo, prudencia. Almirante insiste en que todavía es una "incógnita".

 

 

Imagen principal: reunión de empresa justo antes de las fiestas de Navidad / Unsplash