Alerta por casos de tuberculosis en un instituto ocupado de Badalona que Xavier García Albiol quiere desalojar, según publica este viernes El Periódico. Se trata del instituto municipal B9 —situado entre los barrios del Remei y de Sant Roc—, que fue ocupado en junio de 2023 por docenas de personas migradas que provenían de otros desalojos. Entonces, el Departament de Salut ya habría tenido constancia de un primer caso de la enfermedad, y más de dos años después ya tendría constancia de nuevo —entre los cuales estaría la víctima mortal de un apuñalamiento a finales de agosto, en una pelea—.
Si hace dos años que el instituto fue ocupado, hace dos años que el alcalde lo quiere desalojar. Y el desalojo ya estaría cerca, con el riesgo para la salud pública que eso comportaría. Así lo advierten desde el Hospital Germans Trias y Pujol (Can Ruti), que insisten en que la desocupación es "arriesgada" desde un punto de vista epidemiológico. Cristina Vilaplana es la jefa de la Unidad de Tuberculosis del centro y la responsable que ha conocido de primera mano los casos de la enfermedad, y explica a El Periódico que se ha hecho un gran esfuerzo durante el último año por establecer una "red de confianza" con los contagiados para conseguir que se ataran al sistema. "Algunas de estas personas ya han acabado el tratamiento, pero hay otros que no. En cualquier caso, todas estas personas están bajo control", ha explicado. La tesis de Can Ruti tiene el apoyo de la Societat Catalana de Mediació en Salut, desde donde consideran que hay un "riesgo importante" porque hay posibilidades de contagio, sobre todo si tenemos en cuenta que se trata de personas vulnerables.
El alcalde no sabía nada
Desde el Departament de Salut han rebajado la alerta, ya que "se ha seguido el protocolo establecido" y no tienen constancia que haya casos que puedan transmitir la enfermedad. Con respecto a este último punto, han argumentado que las personas infectadas tienen que estar ingresadas en un centro sanitario para evitar la exposición a otra gente y recibir tratamiento y que después ya no son contagiosas.
Por su parte, García Albiol ha asegurado que no tenía conocimiento de la situación, y que, por lo tanto, ninguna autoridad sanitaria los ha informado de esta circunstancia. Desde Salut han comentado que "la notificación de las enfermedades de declaración obligatoria la hacen los profesionales asistenciales" y que, "en el caso de la tuberculosis, la notificación tanto del primer caso como del resto se hace por esta vía". Ahora bien, el alcalde niega haber recibido ninguna información: "Se trata de una irresponsabilidad muy grave y no permitiremos que los vecinos sigan sufriendo el calvario que viven desde hace dos años, ahora con riesgos sanitarios".
Qué es la tuberculosis
El ayuntamiento calcula que en el antiguo instituto viven unas 500 personas, mayoritariamente migrantes de origen subsahariano y en situación de vulnerabilidad. "Están malnutridas, y por eso mismo desarrollan enfermedades que se aprovechan de estas circunstancias. La tuberculosis aparece cuando bajan las defensas y es entonces cuando las personas pueden contagiar", ha indicado Vilaplana. Ahora bien, es difícil hablar de "brote" porque no se puede demostrar que los diferentes casos estén relacionados. Según recoge El Periódico, desde Can Ruti y Salut sí que apuntan que las personas que han recibido tratamiento comparecen o han compartido el mismo espacio.
En su sitio web, Salut recuerda que la tuberculosis es una enfermedad contagiosa producida por el bacilo Mycobacterium tuberculosis que se transmite a través las gotas microscópicas que las personas expulsan en el exterior al hablar, toser, estornudar o escupir. Afecta principalmente a los pulmones (pero puede afectar a otros órganos), con la tos persistente como el principal síntoma. Tiene una evolución lenta (de meses o, incluso, años), y puede presentarse de forma aguda y más grave en personas con factores de riesgo. La enfermedad destruye lentamente el órgano afectado y, en el caso de los pulmones, llega a formar cavernas. En ausencia de tratamiento, las personas infectadas pueden contagiar entre diez y quince personas el año. Sin embargo, se puede evitar y cuidar si se toma seriamente la amenaza, con prevención, diagnosis y tratamiento.
Imagen principal: la comitiva judicial en el instituto B9 de Badalona después de que una pelea acabara con un apuñalamiento mortal a finales de agosto / ACN