Más dimisiones en cadena en Vox. La presidenta de la formación de ultraderecha en Sevilla, María José Piñero, ha presentado su dimisión este miércoles. En una carta que ha enviado a los afiliados y que recoge el diario ABC Sevilla expone que "hace más de un año se ha creado en Vox Sevilla una estructura paralela al margen de la voluntad democrática de los afiliados, protagonizada por determinados personalismos y apoyada por Vox España, al margen del ordenamiento estatutario, que ha desplazado al Comité Ejecutivo Provincial y, cómo no, a mi presidencia".

"Por fidelidad al ideario original de Vox he aguantado, esperando que el partido reaccionara y fuera leal conmigo, con sus directivos y sus afiliados. Cuán equivocada estaba hasta el punto de darme cuenta de que, este gobierno del partido paralelo, ha estado prefiriendo perjudicar al partido con tal de desplazar y retirar a cualquier persona que pudiese destacar por trabajadora, inteligente, preparada y capaz que fuese", explica a la carta. "He visto cómo el proyecto tomaba una deriva que no ha gustado a nadie, basada en las relaciones de poder, soberbia y miedo". Y continua: "Hay determinadas cosas que no toleraré y es que se juegue irregularmente con los recursos económicos de los afiliados para lanzar la carrera política y las ambiciones de unos pocos, que solo buscan proyección personal".

Tal como explica en la carta, Piñero envió un burofax a las instancias más altas del partido "para que estos problemas fueran resueltos de manera fulminante, obteniendo la negativa y la amenaza por respuesta". La misiva acaba dando ánimos a los afiliados y les pide que no se desanimen.

Con esta dimisión de la ejecutiva provincial de Sevilla, ya son seis las provincias donde han dimitido sus presidentes. Solo Málaga y Córdoba tienen dirigentes estables. Los otros se encuentran en manos de gestoras hasta la celebración de las primarias que serán esta primavera.

"Nada inusual"

Desde Vox Andalucía, a través del portavoz parlamentario del partido, Alejandro Hernández, han señalado este miércoles que "cuando un partido crece" son habituales las dimisiones en cargos orgánicos, como ha sido el de la presidenta provincial de Vox Sevilla, pero ha insistido que "no incide ni en el grupo parlamentario ni en el partido".

Preguntado al respecto en rueda de prensa, Hernández ha circunscrito esta dimisión a "una cuestión interna de la provincia de Sevilla" y, por tanto, serán "ellos los que tendrán que solucionarlo en colaboración con la dirección nacional". "No es nada que no ocurra en todos los partidos. Nada inusual", subrayó.

No obstante, ha reconocido que, en el caso de Vox, al no tener estructuras territoriales, "los asuntos menores parece que tienen una mayor significación".

Malestar en Vox

Estos casos, sin embargo, no son hechos aislados. Unas 40 provincias de toda España se encuentran en una situación similar con cambios de gestora decididos desde Madrid, como ya pasó en Vox en Barcelona. Como muestra de este descontento interno, las provincias que no están conformes con el sesgo del partido estaban decididas a dar apoyo a la candidatura de Carmelo González para disputarle la presidencia a Santiago Abascal. Aun así, finalmente, no consiguió los apoyos suficientes, tal como informó la formación de ultraderecha. De esta manera, la candidatura encabezada por Abascal se ha quedado sin competidores y será la proclamada el próximo día 7 en la asamblea general de Vistalegre.

De hecho, esta deriva que expone Piñero tiene ciertas similitudes con la que denuncian, sin ir más lejos, desde Vox Barcelona, donde la antigua Plataforma per Catalunya de Josep Anglada, tiene una presencia muy fuerte en el partido. El sector crítico ya ha hecho notar en numerosas ocasiones su malestar e intenta que su voz se tenga en cuenta en Madrid.

¿Por qué hay cambios de gestora?

En junio se destituyeron tres miembros del comité ejecutivo por traslado de domicilio de Catalunya en Andalucía y según exponen, la gestora actual de Barcelona fue nombrada a dedo el pasado octubre. La notificación llegó a través de un correo electrónico. "No ha habido ninguna asamblea y estas personas han secuestrado el partido", explican. Según apuntan fuentes del partido, este dedo podría haber sido el del secretario general de Vox, Javier Ortega Smith. Este hecho, como ya se ha visto, se ha repetido en otras provincias.

Fuentes oficiales de Vox aseguran que este cambio de gestora, en Barcelona, fue para "fortalecer y reforzar la estructura del partido en la capital catalana para las elecciones del 10-N" y también para las elecciones a la Generalitat de Catalunya. Así, este cambio en la estructura interna del partido propició que personas que venían de "otras formaciones" –mayoritariamente de PxC, según ha podido constatar este diario– lograran más poder.