Todos los frágiles puentes que unían al independentismo ya parecen rotos. La CUP se ha esforzado en deshacerse de la etiqueta de "socio prioritario" que le cuelga el Govern de la Generalitat. Así lo han puesto de manifiesto también este martes en el Parlament, donde ha evidenciado que "la alianza está rota" fruto del incumplimiento del acuerdo de investidura del president Pere Aragonès. Pero desde la plaza Sant Jaume niegan la mayor. Desde la tribuna de oradores de la cámara catalana, la consellera de la Presidencia, Laura Vilagrà, ha rebatido la premisa y ha cifrado en un 40,6% el cumplimiento provisional del pacto que firmaron. Y ha instado a los anticapitalistas a negociar y acabar aprobando los presupuestos para el año 2023.
Ha sido en una interpelación en el pleno del Parlament que la presidenta del grupo parlamentario de la CUP, Dolors Sabater, ha exigido por el cumplimiento del acuerdo de investidura. Y ha puesto el ejemplo del debate de política general, celebrado la semana pasada, cuando ERC y Junts per Catalunya tumbaron la mayoría de propuestas de resolución de los cuperos. "¿Con qué presupuestos nos quieren seducir si las propuestas que hacemos las votan en contra?", ha preguntado Sabater. En la misma línea se ha pronunciado, horas antes, la diputada Laia Estrada, que ha constatado el estado de la relación: "La alianza con nuestra formación está rota. Se nos nombra los socios preferentes, pero no estamos aprobando nada, mientras los socios efectivos (el PSC) están en la informalidad".
La respuesta a la interpelación ha ido a cargo de la consellera de la Presidencia, Laura Vilagrà, que ha rebatido el diagnóstico de la CUP. El Govern ha cifrado en 40,6% el cumplimiento de este acuerdo investidura que firmaron ERC y los cuperos. Y ha añadido que un 91% de las medidas recogidas en el pacto "ya tienen algún grado de ejecución". Concretamente, 6 se han ejecutado, 54 están en ejecución, 12 tienen la ejecución planificada y sólo siete están sin planificar.
La dirigente republicana ha asegurado que la CUP tiene derecho a ser "exigente, reivindicativa y activista". Pero ha replicado que no reconocer los "avances", el mismo día que el Govern de la Generalitat ha aprobado los estatutos de la empresa energética pública, "es como mínimo injusto y seguramente se podría calificar de temerario".
En este contexto, Vilagrà ha recordado que el 52% de las propuestas requerían la aprobación de los presupuestos el año pasado, que la CUP votó en contra, y les ha instado a negociarlos este año. Ha dejado claro que su compromiso es el de seguir desplegando este pacto de investidura, subrayando que las nuevas cuentas públicas contendrán un aumento del 70% respecto de 2020 de la partida para la adquisición de vivienda a través del tanteo y retracto.