El Estado español no podía permitirse tener, a ambos lados de la plaza Sant Jaume de Barcelona, un president de la Generalitat y un alcalde independentistas. Este es el motivo por el que Xavier Trias cree que se convirtió en la primera víctima conocida de la operación Catalunya. El exalcalde de Barcelona ha comparecido este lunes en la comisión del Congreso de los Diputados que investiga esta trama de la policía patriótica. En su discurso, ha exigido "disculpas" al PP por su guerra sucia y a Ada Colau por haberse aprovechado en campaña electoral de informaciones que ya se sabía que eran falsas. Ha hecho gala de su desconfianza en la justicia española y ha destacado su decepción con Jorge Fernández Díaz y Mariano Rajoy. También ha denunciado que el espíritu de la operación Catalunya continúa intacto: la determinación de formaciones políticas como los Comuns y el PSC por hacer contorsionismo pactista a cambio de que un independentista no sea alcalde de la capital del país.

 

El exalcalde de Barcelona es la primera víctima conocida de la operación Catalunya por una información falsa publicada en El Mundo en 2014 que lo acusaba de esconder una fortuna en Suiza. A principios de este mes de mayo se abrió a presentar una querella contra esta guerra sucia, aunque fuera archivada la denuncia que presentó en 2017 contra el exdirector adjunto operativo (DAO) de la Policía, Eugenio Pino. El excomisario se inventó que Trias tenía una cuenta en Suiza con 12,9 millones de euros.

Xavier Trias, que antes de gobernar la capital catalana fue conseller de la Presidència de Jordi Pujol durante cuatro años y diputado en el Congreso durante el mismo tiempo, ha comparecido con un tono profundamente conciliador. "No pretendo que nadie vaya a la cárcel; pretendo que a los que lo han hecho les dé vergüenza y admitan que se han equivocado", ha aseverado al principio de su discurso. También, antes de entrar en la sala, en declaraciones a los periodistas, ha enfriado la posibilidad de sumarse a Artur Mas y presentar una nueva querella por este uso de las cloacas del Estado.

 

El expresident de la Generalitat, que compareció en esta misma comisión de investigación hace un par de semanas, ha denunciado a la excúpula de Interior y del PP y no descarta ampliar su denuncia contra el expresidente del Gobierno Mariano Rajoy y la exvicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría. Pero este lunes Trias ha disparado contra la justicia española. "No me fío nada de ella", ha manifestado. Y ha repetido en varias ocasiones —también dentro de la sala— que aspira a una rectificación moral por parte de los impulsores de la operación Catalunya: "No pido que me indemnicen; lo único que pido es que reconozcan que se han equivocado, que me pidan disculpas y que pasen vergüenza".

"Vergüenza" para el PP, y también para Ada Colau

Trias fue alcalde de Barcelona entre 2011 y 2015 y no pudo mantenerse en el cargo en un segundo mandato debido a su derrota en unas elecciones municipales influidas por la información falsa fabricada en la operación Catalunya. A pesar de eso, en su comparecencia de este lunes ha insistido en que, según su opinión, aquella información falsa no fue lo único que lo apartó de la revalidación del cargo. Ahora bien, ha señalado que los Comuns y Ada Colau también le tendrían que haber pedido disculpas —ha lamentado que no lo hayan hecho nunca— por haberse aprovechado en la carrera electoral de la información falsa publicada en la prensa española. Ante la ausencia de ningún representante de Podemos, Sumar o los Comuns en la sala, ha denunciado que les da "vergüenza" dar la cara ante el exalcalde barcelonés.

"Con Fernández Díaz fui a visitar al Papa"

Trias se ha mostrado este lunes profundamente decepcionado con el expresidente del Gobierno Mariano Rajoy y con el exministro del Interior Jorge Fernández Díaz, dos personas con quienes ha asegurado que tuvo una buena relación durante los cuatro años que fue diputado en el Congreso. "Con Fernández Díaz fui a ver al Papa", ha destacado al exalcalde de Barcelona, que ha recordado como el cerebro de la operación Catalunya le había invitado a participar en reuniones de parlamentarios creyentes y le había pedido viajar al Vaticano para visitar conjuntamente al Santo Padre.

 

El exalcalde de la capital catalana ha opinado que un católico no puede diseñar una estrategia de guerra sucia como la operación Catalunya: "No se pueden utilizar unas herramientas que son absolutamente ilegales". Ha explicado que en algunas conversaciones que ha tenido con Jorge Fernández Díaz, el exministro del Interior le ha reconocido que, como católico, esta trama le ha generado muchos quebraderos de cabeza y lo ha colocado en una "situación complicada". Trias ha añadido que un creyente tendría que disculparse. "Y yo, también como católico, por mucha rabia que tenga dentro, lo perdonaría", ha sentenciado.