Ciudadanos sigue en caída libre. El comité permanente del partido ha anunciado este martes que han decidido nombrar una comisión gestora en Andalucía, que ocupará el hueco de poder que dejó su excoordinador, Andrés Reche, quien presentó la denuncia después de la derrota electoral, según ha anunciado OK diario. Reche asumió la responsabilidad de Ciudadanos después de que de la dimisión de Juan Marín por el descalabro en las elecciones autonómicas de Andalucía el 19 de junio de 2022, donde perdió los 21 escaños que tenía en el parlamento andaluz. Reche también presentó su renuncia después de los malos resultados de los comicios municipales del 28-M, con la intención de volver a su plaza de Policía Municipal de Málaga. Desde agosto de 2022, Reche ocupa la presidencia de otra gestora de Cs en Andalucía antes de ser designado como presidente del Comité Autonómico de Ciudadanos en Andalucía.

Ciudadanos ha detallado, a través de un comunicado, que la comisión gestora será la encargada de dirigir el partido en la comunidad "sustituyendo, provisionalmente, al Comité autonómico". Del organismo donde formaba parte Reche, todavía quedan la comisión gestora, la presidenta del órgano y secretaria de Recursos Humanos, María Jesús Palacios Álvarez, y el secretario de Comunicación y Programas, Juan Luis Santos Borrego. A la Comisión Gestora se han incorporado nuevos miembros: María José Peña Arroyo como secretaria de Organización y Acción Institucional y Jesús Lupiáñez Noguerol como secretario de Relaciones Institucionales. Como vocales de este órgano figuran Agustín Cánovas Sáez, Pedro González Díaz, Jesús López García, Ismael Morales Molina, Noelia Álvarez González, Enrique Moreno Madueño, José Carlos Martín Torres y Francisco Javier Loscertales Fernández.

La crisis continúa en Ciudadanos

La crisis en Ciudadanos ya viene de lejos. La última baja de sus filas fue el pasado mes de agosto con la salida de su portavoz, Patricia Guasp, que anunciaba que dejaba la política activa después de 8 meses al frente del partido. Guasp fue quien sucedió a Inés Arrimadas al frente de la formación naranja y encabezó la derrota de su partido en las pasadas elecciones municipales y autonómicas por todo el Estado, en las cuales en Catalunya solo obtuvo 10 concejales.

Después de decidir no presentarse a las elecciones generales del 23-J después de la derrota electoral en las municipales, su portavoz parlamentario, Nacho Martín Blanco, anunciaba que renunciaba al escaño, a los cargos de partido, a la Ejecutiva y que dejaba la política en lo que describía como una "decisión difícil que no querría haber tomado" pero que atribuyó a su pesimismo con respecto al futuro del partido. Solo 4 días más tarde saltaba la sorpresa y Martín Blanco se convertía en número 1 a las listas del PP por Barcelona para el 23-J.

Algunos de los exdirigentes de Ciudadanos no han tenido suficiente con marcharse del partido, e incluso, cambiarse de chaqueta, sino que han amenazado con formar un nuevo partido. El pasado mes de junio, el exdiputado en el Congreso, Edmundo Bal, el procurador de las Cortes de Castilla y León, Francisco Igea, y el exconcejal en el Ayuntamiento de Madrid, Santiago Saura, se unían para impulsar este nuevo proyecto después de considerar a Ciudadanos un partido "muerte". En una reunión en Madrid con quince miembros del Consejo General de Cs, Bal afirmó: "Quiero decir una cosa a mi partido, ellos se quedan con la caja, nosotros nos llevamos las ideas". De esta manera, dejó claro su descontento con la dirección del partido y su determinación de buscar un nuevo rumbo político.