"El método de negociación no ha funcionado". Con este diagnóstico, después de cinco reuniones donde no han acercado posiciones, el candidato a la investidura, Pedro Sánchez, ha anunciado que este mismo jueves llamará a su socio Pablo Iglesias para que se constituyan los equipos negociadores de las dos formaciones. A pesar de todo, no se mueve de su posición: un gobierno monocolor. Y ha vuelto a justificarlo en las diferencias sobre la crisis catalana. El ejemplo: una eventual aplicación del artículo 155. Todo a menos de dos semanas del debate de investidura, para el que no tiene los apoyos necesarios.

"Estamos a las puertas de la sentencia del Tribunal Supremo en breves meses, con los independentistas que no han renunciado a la vía unilateral y que dicen que lo volverían a hacer", ha subrayado el presidente español en funciones en una entrevista este jueves en Los Desayunos de TVE. Y se ha preguntado en este sentido: "Si lo vuelven a hacer, ¿Unidas Podemos dará apoyo al gobierno en la aplicación, que no deseo, del 155? ¿Estaría en un gobierno que diera apoyo al 155"". Ha recordado que, ahora hace dos años, recurrieron ante el Tribunal Constitucional.

Otro ejemplo que ha utilizado que les separa es que en Unidas Podemos "habla de presos políticos" mientras "el PSOE defiende que no hay presos políticos". Es por eso que ha dicho que va mucho más allá de la defensa de un referéndum. "Tenemos discrepancias muy serias en políticas de Estado", ha asegurado. Ha avisado de que no sería un Gobierno con un mensaje coherente, sino que "se paralizaría por sus propias contradicciones".

Después del choque frontal en la reunión del martes, Sánchez ha anunciado que en las próximas horas hablará con él para "poner en marcha los dos equipos de negociación" para "rebobinar y vuelve al punto de partida". Ha señalado que el problema, hoy por hoy, ha sido "mezclarlo todo", los contenidos y las sillas del Consejo de Ministros. Ha instadot a hablar primero del qué y después tratar de resolver el quién.

Negociar la abstención del PP y Cs

Una vez más, el candidato a la investidura ha defendido la necesidad de un "gobierno progresista que no dependa de los independentistas", hecho que requiere del "compromiso" del PP y Ciudadanos. En esta línea, Sánchez se ha mostrado "dispuesto a negociar" su abstención en la investidura. "Lo que he encontrado es uno no", ha lamentado.

Reforma del artículo 99

Una vez investido, el secretario general del PSOE se ha comprometido a promover una reforma del artículo 99 de la Constitución española con el objetivo de evitar situaciones de "bloqueo" como la actual. Este artículo establece el sistema de mayorías para la investidura y la repetición electoral. "No funciona y debe ser reformado", ha defendido. Lo propondrá al resto de grupos del Congreso.