El presidente Mariano Rajoy ha reconocido a título particular que no tenía información de dónde estaba la secretaria general de ERC, Marta Rovira, durante la rueda de prensa de este viernes al mediodía, desde Bruselas, donde se encontraba de cumbre en la Unión Europea (UE). Esto ocurre aunque la republicana tenía comparecencias quincenales ante el juzgado, pero el pasaporte vigente, una vez el juez instructor le decretó libertad bajo fianza de 60.000 euros.

El hecho es que las declaraciones de Rajoy llegaban horas después de que se hiciera pública la carta donde Rovira exponía los motivos de la salida, donde hablaba de la "injusticia" de la respuesta judicial del Estado a los dirigentes independentistas. Si bien, el jefe del ejecutivo se ha vuelto con que lo "normal en cualquiera es comparecer cuando hay una citación".

Así las cosas, Rajoy ha huido en todo momento de valorar la posibilidad de que miembros del antiguo Govern ingresen en prisión este viernes, si es que el juez Pablo Llarena lo estipula, o si la Fiscalía volvía a retomar las órdenes de detención a Carles Puigdemont y el resto de consellers en el extranjero.

El número uno del Gobierno, si bien, ha reconocido que no es "partidario" de que se repitan las elecciones este verano y ha llamado a recuperar la normalidad institucional, económica y social. Eso sí, ha dicho que "da la sensación a veces que no se quiere resolver el problema" al proponer a quienes están fuera o con causas judiciales pendientes. Por ello, ha pedido a Roger Torrent candidatos "ajustados a derecho", que "cumplan la ley", preguntado sobre qué pasaría si Jordi Turull era encarcelado y había que abrir una nueva ronda de consultas.

Finalmente, el jefe del ejecutivo ha abogado por el diálogo —tras la mano tendida del propio Turull—, pues ha recordado que ya lo propuso después de los comicios del 21-D, pero sin concretar Rajoy qué pretendía ofrecer.