Los plenos en el Parlament volverán esta semana. Concretamente el jueves, cuando se escoja a la diputada de JxCat Aurora Madaula en sustitución de Jaume Alonso Cuevillas a  la secretaría de la Mesa, se hará una sesión de control al Govern en funciones y comparecerá el Síndic de Greuges para abordar las cuentas generales de la Generalitat de 2016 y 2017 y el informe del Síndic de 2019.

En el pleno no se producirá, sin embargo, la comparecencia del vicepresident en funciones de president, Pere Aragonès, para dar explicaciones sobre la gestión de la Covid-19, tal y como había pedido el PSC, que ya ha cargado contra la decisión.

"Lamentamos que Aragonès se niegue a comparecer aunque sí que hará la sesión de control. Creemos que es una falta de respeto por los ciudadanos", ha criticado a la portavoz de los socialistas en el Parlament, Alicia Romero. Para los socialistas es "inverosímil" que el líder del Ejecutivo en funciones no comparezca a pesar de "no tener otras tareas ni estar de viaje".

Sin embargo, el pleno de este jueves sí que permitirá que los grupos voten las comparecencias pedidas. Romero ha adelantado que ya han pedido a la Sindicatura de Cuentas y de Greuges que si el pleno lo aprueba la comparecencia se lleve a cabo durante el siguiente pleno "para que el vicepresident Aragonès ya no tenga más excusas".

 

Pacto antiVox

Preguntada sobre si las amenazas dirigidas a dirigentes del PSOE como el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, la directora de la Guardia Civil, María Gámez, y hoy mismo la ministra de Indústria, Reyes Maroto, harán cambiar el compromiso del PSC con el cordón antifascista en el Parlament, Romero ha insistido en que la formación siempre ha cumplido con el pacto.

"Compartimos los objetivos. Lo que no compartimos es la estrategia de poner constantemente a Vox en el centro del debate. Es mejor hacer el trabajo sin que se puedan victimizar", ha dicho. Romero también ha recordado que a pesar de vetar la designación del senador, independentistas y comuns han permitido que el partido de extrema derecha tenga representación en comisiones parlamentarias.

Otro aspecto que distancia a los socialistas de sus socios en la Moncloa es la formación del nuevo Govern . Esta mañana, la número dos del partido, Eva Granados, ha rechazado investir a Aragonès aunque el Govern fuera de ERC en minoría​ y ha reivindicado que la alternativa "de izquierdas" la tiene que liderar Salvador Illa.

 

Imagen principal: la portavoz del PSC en el Parlament, Alicia Romero / ACN