Los medios internacionales de referencia coinciden en su análisis: sea cuál sea el resultado de las elecciones del 21-D, la crisis pide negociaciones, no solo para constituir un gobierno y una mayoría parlamentaria sino para resolver la crisis entre Catalunya y España. La mayoría de los medios, incluidas las agencias, han preferido escribir reportajes donde hacen hablar a partidarios de unos y otros y explicar qué está en juego, aclarando que no se trata de un referéndum.

Para la agencia de noticias británica Reuters, los catalanes están "profundamente divididos" y cualquier resultado del 21-D deja "muy delgadas las esperanzas de resolver la peor crisis política de España en décadas". Una victoria independentista "pondría en duda la capacidad de Mariano Rajouy de resolver el conflicto".

La agencia norteamericana Associated Press no se atreve a tanto. "Esta elección decisiva difícilmente romperá el amargo empate sobre la secesión ni en el caso en que ninguno de los dos bandos gane una clara mayoría, de manera que el escenario que se abre es el de unas largas y complicadas negociaciones para formar el gobierno catalán".

El diario que tiene una visión más propia es The New York Times. Para su corresponsal, las elecciones son "la apuesta de Mariano Rajoy para que los votantes castiguen a los independentistas, que han promovido la peor crisis constitucional de España en décadas", de manera que el presidente español pueda devolver el autogobierno a una nueva mayoría unionista.

Ahora bien, adelanta, "un resultado fracturado resultará en un estancamiento, incluso aunque los independentistas no ganen".

Todos los medios internacionales recuerdan que estas elecciones se han hecho en condiciones "muy anormales", con la Generalitat intervenida por el gobierno español y el trasfondo de la represión del referéndum del 1 de octubre y la fallida proclamación de la república catalana.

"El aspecto más controvertido de la campaña ha sido que los líderes de los principales partidos independentistas no han estado en Catalunya", remacha el diario norteamericano.

The Guardian, el diario progresista británico, lo ve de la misma manera. "Pocos esperan [de las elecciones] un gran cambio en una región que está dividida más o menos por la mitad en la cuestión de la independencia".

El Financial Times augura que sea cuál sea el resultado, "seguirá un periodo intenso de negociaciones para formar una coalición de gobierno y pocos analistas esperan que acabe el impasse político de los últimos meses".

Parecida conclusión ofrece el diario conservador londinense The Times. "Los analistas predicen que las elecciones resultarán en un impasse, que conducirá a negociaciones largas para formar un nuevo gobierno o incluso a su repetición. Oportunamente, no se espera que, si mantiene la mayoría absoluta, el independentismo intente la separación de España otra vez, sino más bien que intente arrancar conversaciones con el gobierno español".

El diario referente del centro-izquierda italiano, La Repubblica, entrevista a Lucio Caracciolo, director de la revista geopolítica italiana Limes. "Estas elecciones no solucionarán la cuestión catalana", dice. Caracciolo tiene claro que "no se puede reemplazar la política por el poder judicial, la policía y la constitución; la cuestión catalana no se puede resolver con un golpe fuerte, sino que se tiene que gestionar con negociación y una apertura al compromiso entre las partes".