El incendio de Els Ports sigue fuera de control y no se espera que hasta pasado el mediodía, cuando entre la marinada, los Bombers le puedan poner el pie en el cuello. Durante toda la noche se ha trabajado a contrarreloj, aunque con el mistral complicando el trabajo, para evitar que las llamas que habían saltado el Ebre, en Tivenys y Bítem, progresaran en dirección a la sierra de Cardó, lo que podría convertir el incendio en muy grande, superando de largo el potencial de 3.500 hectáreas que habían proyectado ayer los analistas de los Bombers, por las diversas zonas donde se creía que podría avanzar el fuego. Esta será también la prioridad durante esta mañana, a ambos lados del Ebre, atentos a que los focos secundarios, que en algún momento han llegado a saltar unos 200 metros, compliquen todavía más el trabajo. Los otros flancos, más allá de este de Xerta y de la C-12, junto al río, evolucionan mejor, ha asegurado el jefe de los Bombers, el inspector David Borrell, desde Tortosa, donde se ha instalado el centro de mando avanzado y desde donde se dirigen las operaciones. La consellera del Interior, Núria Parlon, también ha participado, a las siete de la mañana, en la primera reunión de valoración de la noche y después ha dado novedades a los alcaldes y también a los medios de comunicación.
El jefe de los Bombers ha apuntado que prevén que el viento vuelva a incrementarse durante las primeras horas de la mañana, pero a partir del mediodía se espera que cambie, con vientos de marinada, lo que permitiría a los Bombers plantear un plan de acción con una situación "que no tiene nada que ver con la de ahora". Ha añadido que, después de días con condiciones muy extremas, este martes "no es el peor día" de cara a que se puedan declarar más fuegos, un hecho que les hace ser optimistas, si bien, con mucha precaución, sabiendo cómo cambió, en poco rato, ayer, la situación. Parlon ha reconocido que la pasada noche ha sido "muy complicada", principalmente por el cambio de viento que hizo que se llegara a rachas de hasta 90 kilómetros por hora. En este sentido, el flanco izquierdo traspasó la carretera que va de Paüls a Xerta y eso dificultó las tareas de extinción. Con todo, ha apuntado que se ha conseguido el objetivo táctico de que el fuego no fuera hacia el valle de Cardó. La consellera ha dicho, sin embargo, que todavía quedan "horas críticas".
El incendio ya ha superado las 2.500 hectáreas afectadas
Durante todo el día se seguirá luchando contra las llamas, en la zona donde se las puede atacar cara a cara, y también en aquellas donde hay que hacerlo desde el aire o desplegando, por el suelo, equipos manuales. Durante toda la noche los jefes de los Bombers han movido a los efectivos por todo el perímetro, que ya supera, en su área, las 2.500 hectáreas —hará falta ahora que los Agents Rurals analicen qué superficie se ha llegado a quemar— para ir respondiendo a las reanudaciones y los cambios de las carreras. Por suerte, las dos lenguas que han pasado el Ebre, con la acción del GRAF sobre el terreno, se han podido contener y se espera que no progresen, pero los esfuerzos ahora están aquí, con efectivos desplegados en la carretera C-12, un punto fácil donde atacar las llamas.
Los medios aéreos, con el apoyo también de equipos del Ministerio de Agricultura, los FOCA, de gran capacidad, ya se encuentran trabajando sobre el terreno. Además, también se desplegará un bombardero de la Unidad Militar de Emergencias (UME), cuya activación pidió ayer por la noche el gobierno catalán al ejército. Junto con equipos de extinción del suelo, y buscando las oportunidades que deje el viento seco de mistral, y, sobre todo, esperando la marinada, se trabajará sin descanso para intentar rodear las llamas y estabilizarlo esta tarde. La jornada, como la noche, será larga.