El presidente provincial del PP en Barcelona y alcalde de Castelldefels, Manu Reyes, considera que el PSC es el castigado en el reparto de ministerios que ha realizado cuyo presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para el nuevo ejecutivo, solamente ha nombrado a Jordi Hereu como el único nuevo representante de los socialistas catalanes. Según ha recordado, además de perder la presidencia del Congreso, que estaba presidido por Meritxell Batet, el PSC ha pasado de tener dos representantes en uno en el nuevo ejecutivo: "Se ha llevado la pedrea. Así le paga Sánchez al PSC el trabajo hecho", ha apuntado Reyes.
En este contexto, ha criticado el nuevo "gobierno de (Pedro) Sánchez y (Carles) Puigdemont" de 22 ministerios, y que Félix Bolaños asuma ahora también el Ministerio de Justicia, por lo cual consideran que será el encargado de gestionar la ley de amnistía. "Nos sorprende que Bolaños sea la persona encargada de velar por esta ley de amnistía, que no compartimos, y que ha sido el precio a pagar, exigido por Puigdemont, para dar sus votos," ha destacado en rueda de prensa acompañada por el diputado del partido en el Congreso, Nacho Martín Blanco.
Comparación con el sorteo de Lotería de Navidad
Para Reyes, la composición del nuevo ejecutivo "más bien parecía el sorteo de Navidad con los 22 nuevos agraciados, y el premio gordo se lo ha llevado el leal escudero de Pedro Sánchez, Félix Bolaños". Después de reprochar que Sánchez no haya reducido el número de ministerios, cree que al nuevo organigrama le falta "un eslabón, el de Puigdemont, que estará por encima de Pedro Sánchez y le dictará lo que tiene que hacer durante los próximos cuatro años". "No sabemos si las sesiones de control se trasladarán a Waterloo o se seguirán haciendo en el Congreso", ha ironizado el dirigente popular, que ha añadido que el PSC ha sido el actor castigado en el reparto de los ministerios.
Sobre el nuevo ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, Martín Blanco lo ha acusado de dedicarse "a agitar las bajas pasiones, a la confrontación gratuita y a hacer una política basada en el insulto, el menosprecio y la agresividad parlamentaria". En su opinión, Puente es "capaz de anteponer" el interés de su partido o el de su líder al interés general de España, por|para lo cual no espera que su gestión tenga grandes éxitos, tampoco con Rodalies.
En tromba contra Sánchez
Después de la investidura de Sánchez, Martín Blanco ha acusado al presidente del Gobierno de tener un compromiso "muy ligero" con la unidad de España y ha aventurado una legislatura difícil, inestable e insegura en términos jurídicos, lo cual considera que tendrá consecuencias en términos de convivencia y desarrollo económico. "No es un gobierno socialista para España, es un gobierno contra España", ha sostenido al diputado del PP, después de constatar que la mayoría de las formaciones que han apoyado a Sánchez son independentistas.
Es más, considera que Sánchez ha pactado "con un personaje siniestro, ultranacionalista y de extrema derecha", en referencia a Puigdemont. "Si la gran preocupación del gobierno y del espantajo que seguirán alimentando es avisar de que viene la extrema derecha, no señor Sánchez. Usted ya ha metido al ultranacionalismo más rancio, casposo y reaccionario de Europa en su Gobierno", ha aseverado.
