La portavoz del Partido Popular (PP), Cuca Gamarra, ha hecho equilibrios dignos de funambulista para justificar la abstención de su grupo en la moción de censura de Vox contra Pedro Sánchez. El PP ha buscado argumentos para criticar la iniciativa de la ultraderecha para anticipar el final de la legislatura de Pedro Sánchez a la vez que ha hecho lo imposible para proteger la figura de Ramón Tamames. "No votaremos a favor por respeto a los españoles, pero no votaremos en contra por respeco a usted", ha dicho Gamarra refiriéndose al candidato de Vox, de quien ha explicado que comparte la visión de "la España de la reconciliación y de la Transición".

El PP considera que la moción es "ociosa, extemporánea e inútil" y que ofrece "un regalo inexplicable en el gobierno". Por eso ha defendido que Pedro Sánchez tiene las horas contadas en La Moncloa. "Este año hay otra moción de censura, que no se votará en la cámara, sino en las urnas", ha vaticinado Gamarra en la primera intervención de la segunda jornada en la cámara en referencia al ciclo electoral de 2023.

En la intervención, Gamarra ha desacreditado a la extrema derecha, de quien dice que, con la moción de censura, hace un favor a Pedro Sánchez. "Si eso se trata de un acto de propaganda electoral, este no es ni el sitio ni el momento ni la forma. Con la previsible derrota, el ejecutivo podrá exhibir una unidad que no tiene", se ha quejado la portavoz popular, que ha recordado que a Pedro Sánchez "le han regalado una cortina de humo por tapar sus escándalos". Aquí el PP ha sacado la artillería y ha puesto sobre la mesa los escándalos que asedian el PSOE empezando por el caso Mediador, pasando por las sentencias de los EROS en Andalucía, los indultos, la reforma del Código Penal y la ley del "solo sí es sí".

"La desprotección del Estado"

Y Catalunya siempre sirve como arma arrojadiza en el PP. "Ha aceptado desproteger el Estado con la derogación del delito de sedición, favoreciendo los corruptos y permitiendo que sus socios saboteen abiertamente cuestiones básicas de nuestras políticas", ha denunciado Gamarra, que ha constatado que, si pueden, "los independentistas volverán a desafiar la democracia española". Y los indultos y Carles Puigdemont también siempre funcionan. "Cuando había sentencias que no le gustaban, el gobierno utilizó los indultos en contra del criterio propio del tribunal sentenciador y sin propósito de rectificación de aquellos que habían sido condenados", se ha referido antes de reprochar a Pedro Sánchez que no haya cumplido la promesa de juzgar a Puigdemont. "Lo que hizo es enviar mediadores para que volviera e indultarlos, como al resto".

En la parte final, el PP tampoco se ha estado de criticar las consecuencias de la ley del solo sí es sí. En este sentido, Gamarra ha opinado que ha sido "un monumento al sectarismo ideológico, a la ignorancia jurídica y el atropello a las mujeres y a los niños" y para la cual ha recriminado que el Gobierno nunca haya tenido "ninguna palabra de perdón y consuelo".