El discurso del president Quim Torra en Madrid no ha movido mucho la aguja de la opinión publicada en Madrid. Algunos de sus artículos en una pequeña web han excitado más a los diarios de la capital española que una intervención trabada y razonada —guste o no— como la de ayer. Sólo los diarios de Barcelona lo notician en portada y destacan el argumento más manoseado, el de la "confrontación", que ya está fijado como el equivalente a "declarar la guerra", pese a todas las aclaraciones que se han hecho las últimas dos semanas desde el campo indepe. Tiene gracia, porque como confrontación también puede describirse el tipo de relación frustrada que sostienen PSOE y Unidas Podemos desde hace meses (El Periódico incluso lo llama "asalto" de boxeo), o el tipo de pugna con uñas y dientes que se sigue en el parlamento británico a propósito del Brexit.
Tampoco ha tenido suerte la imputación de todos los mandos policiales que el 1 de Octubre ordenaron cargas en Barcelona. Ara y El Punt Avui son los el únicos diarios que abren con esa confrontación entre juez y policías. El Periódico no lo puede publicar más pequeño, aunque lleva en portada. La Vanguardia, ni mu. Pasa lo mismo con la denuncia de los presos políticos Jordi Turull, Josep Rull y Jordi Sànchez contra España Global por perjudicar su presunción de inocencia. De esas confrontaciones, nada. Ni de la confrontación entre Javier Nart y su expartido, Ciudadanos.
También se queda sin portada —salvo en El Punt Avui— la decisión de la justicia de Bélgica de seguir investigando el espionaje al president en el exilio, Carles Puigdemont, cosa que amenaza con otra confrontación con los servicios de inteligencia españoles. El Mundo, en cambio, se hace eco de una evaluación de la Unión Europea sobre la aplicación de las euroórdenes y abre su portada con el sobrentendido de que España es uno de los estados víctimas de malas prácticas, en alusión al caso Puigdemont. La evaluación europea es una cosa genérica, pero es que ayer el día no dio para muchas más confrontaciones, que —por lo leído— son exclusiva del presidente Torra.
