El miércoles pasado se puso de manifiesto en el Congreso de los Diputados la fragilidad de la aritmética que hace posible al gobierno de Pedro Sánchez aprobar leyes en la cámara baja. La tarde fue agónica porque no se sabía qué había votado Junts per Catalunya; y Podemos tumbó uno de los tres decretos ley que se votaban, precisamente el impulsado por el Ministerio de Trabajo, en manos de la líder de Sumar, Yolanda Díaz. Ahora, después de haber demostrado que puede tumbar iniciativas parlamentarias en el Congreso, ha avisado de que no avalará en esta cámara "ninguna ley que restrinja derechos" a inmigrantes; después del pacto entre PSOE y Junts sobre esta cuestión.

Ha sido el portavoz de los morados Javier Sánchez Serna quien ha hecho este aviso. Sin embargo, al mismo tiempo, se ha abierto a avalar cuestiones de "competencias" de las comunidades autónomas. "Tenemos que ir a asegurar los derechos de las personas, habilitando vías seguras y mecanismos para las personas refugiadas", ha añadido en rueda de prensa. Sánchez ha hecho estas afirmaciones al ser preguntado por los acuerdos entre el Gobierno y Junts sobre la gestión de la inmigración en Catalunya. Para Podemos, actualmente hay "políticas racistas" en el Estado que hay que cambiar.

Este lunes, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha se ha pronunciado sobre este tema. Ha querido dejar claro en una entrevista en RNE que el pacto con Junts per Catalunya en inmigración no implicará que la Generalitat pueda expulsar a inmigrantes. Ya lo explicó este domingo, y este lunes ha reiterado que el control de fronteras continuará en manos del Estado. El líder del PSOE ha defendido el acuerdo con Junts, una vez se le ha preguntado si no se trata de una exigencia con finalidades xenófobas por parte de la formación capitaneada por Míriam Nogueras en Madrid.

Sánchez ha recordado que este partido independentista ya ha gobernado en Catalunya, y que nunca ha habido ningún conflicto relacionado con el racismo y la xenofobia. Ha querido, pues, rechazar cualquier equiparación entre Junts per Catalunya y Vox. "Quien ha incorporado a un partido xenófobo" en la gobernabilidad de las administraciones "es el PP con Vox", ha espetado el presidente del Gobierno. De la misma manera, ha recordado que Catalunya "es una de las comunidades autónomas más solidarias" con respecto a la cantidad de inmigrantes que recibe.

Este domingo, Sánchez aseguró que cualquier negociación sobre la delegación de competencias en inmigración se abordará a través de lo que se recoge en el Estatuto —concretamente en el artículo 138, que versa sobre cómo gestionar la acogida de inmigrantes—, a la vez que señala que la política que prevalece es la comunitaria, el Pacto de Migración y Asilo de la Unión Europea aprobado bajo mandato español del Consejo Europeo. Ahora, dice el presidente socialista, hace falta pasar por el trámite parlamentario y encontrar un punto de acuerdo, hablando con el Govern de la Generalitat, que ejercerá estas competencias. Con todo, apunta que la expulsión de migrantes es competencia de la Administración General del Estado, de acuerdo con "la Constitución, el Estatut d'Autonomia de Catalunya y el Pacto de Migración y Asilo Europeo".