El president de la Generalitat, Pere Aragonès, ha aprovechado su viaje a los Estados Unidos para pedir a Junts evitar "ningún paso que pueda cuestionar la estabilidad" del Govern. Unas declaraciones que llegan en medio de la crisis en el ejecutivo catalán y que siguen a las que ya había hecho este lunes la portavoz de ERC, Marta Vilalta. "En un momento de incertidumbre, no se tiene que añadir más incertidumbre", ha argumentado Aragonès desde la Semana del Clima de Nueva York. Entonces, ha defendido que hay que poner el foco sobre "las necesidades inmediatas" de la ciudadanía y las empresas por la crisis energética.

Como "el Govern tiene que tener como prioridad absoluta la situación complicada de la inflación", el president de la Generalitat ha instado a los socios de Govern a "poner el país por delante" en un contexto en el cual "muchas empresas" se plantean "detener la producción" por el aumento de precios. "Las empresas y las familias necesitan apoyo público", ha remarcado. Pero la cuestión es que a Junts le reprochan las negociaciones que mantiene con el Gobierno con el fin de conseguir un referéndum y la amnistía, de manera que ha respondido así: "Si esta propuesta no se considera viable por algunos partidos, que propongan una alternativa que hoy en día no sé ver".

 

¿Una iniciativa para "contentar" a la CUP?

Volviendo a la "incertidumbre" y las "necesidades inmediatas" de la ciudadanía y las empresas por la crisis energética, Aragonès ha confirmado que la energética pública de Catalunya se pondrá en marcha a principios de octubre. Concretamente, se aprobará en la reunión del Consell Executiu del 4 de octubre y comprará energía de forma agregada y promoverá el autoconsumo con renovables, de manera que "tendrá un impacto importante de ahorro en la factura energética de la Generalitat". Además de comercializadora, la nueva compañía pública impulsará la instalación de placas solares en todos los edificios de titularidad pública y la inversión en proyectos de energía verde (como parques eólicos).

El president ha defendido que la energética pública se pondrá en marcha porque es "buena para la ciudadanía" y supone una "pieza importante" en las políticas del Govern contra el cambio climático, no para "contentar" a la CUP. Si bien espera obtener el apoyo de los anticapitalistas para sacar adelante la iniciativa, Aragonès ha asegurado que en el ejecutivo catalán se sigue trabajando con "toda la confianza y complicidad" para "culminar" un acuerdo de presupuestos que "si puede ser" incorpore la CUP.

La energética pública, en marcha en octubre

Por otra parte, ha puesto de relieve que la compañía "generará un punto de inflexión" porque se pondrá "todo el patrimonio de la Generalitat al servicio de la lucha contra el cambio climático y servirá para mejorar la eficiencia energética del conjunto de los servicios públicos". Unas ideas a las cuales se ha sumado la consellera de Acció Climàtica, Teresa Jordà, que ha destacado que la voluntad del ejecutivo catalán es "poner la energía al servicio del bien común" y ha señalado que "por primera vez a la historia de Catalunya, el país dispondrá de una empresa pública de energía para incidir desde el sector público, provocando una mejora sustancial del mercado energético catalán".

La energética pública se constituirá como sociedad de capital, anónima y unipersonal, con participación directa de la Generalitat y actuará como medio propio para mejorar el mercado energético catalán. La mejora se focalizará especialmente en el abastecimiento de la administración, ya que garantizará que el consumo de energía deje de ser un gasto y empiece a ser una inversión con ahorro a corto y medio plazo y, una vez amortizada la inversión, ocurra una fuente de ingresos. "Será el instrumento público de la Generalitat para impulsar la democratización de la energía con cohesión territorial, con capacidad inversora en la generación eléctrica, en los servicios de recarga del coche eléctrico, en los servicios de almacenaje, en los servicios de agregación de demanda flexible, y en el suministro de energía a la misma administración", señala también el Govern, entre otras ideas.