El economista Santiago Niño Becerra ha manifestado que en estos momentos existe "una masa casi infinita de dinero en busca de destino" y que eso es lo que provoca tipos negativos.

"Los tipos negativos son consecuencia del hecho que...existe una masa casi infinita de dinero en busca de destino!. Si mañana la oferta de patatas se hubiera multiplicado por diez, el precio de las patatas se hundiría", ha indicado.

Becerra ha hecho referencia a que los técnicos del Fondo Monetario Internacional (FMI) han salido en defensa de los tipos de interés negativo, como una solución a los problemas de la economía. Según ha publicado el diario El País, los técnicos consideran que la medida ha aliviado las condiciones financieras y, probablemente, ha dado apoyo al crecimiento y a la inflación.

Dinamarca fue el primer país en adoptar esta medida el año 2012, situando el precio del dinero por debajo de cero. Era un movimiento casi a la desesperada para impulsar el crédito, reavivar la inflación y avivar el crecimiento ante unas perspectivas cada vez más ralentizadas en todo el mundo avanzado.

Según El País, los mismos técnicos del FMI se preguntan por qué no ha habido más bancos centrales hayan subido al carro de los tipos negativos. Una cosa que, creen, tiene que ver con "limitaciones legales e institucionales" y con una mayor presencia en algunos países de bancos pequeños, que dependen en gran manera de los depósitos de las familias para sus fondos, y eso los lleva a ser más reticentes a la hora de dar el paso.

Becerra también ha advertido de la deuda acumulada durante esta crisis de la Covid, y ha citado al ministro de Economía del Reino Unido, Rishi Sunak, que ha indicado que sólo se puede comparar "a lo que se contrajo durante las dos Guerras Mundiales". Sunak también ha indicado que la devolución de la deuda obligará a muchos gobiernos durante varias décadas, en los presupuestos. "El planeta se está comiendo el PIB de mañana sin haberlo generado aún", ha apuntado.