Ciudadanos ha denunciado al ministro de Transportes, José Luis Ábalos delante de la Fiscalía General del Estado por presuntos delitos de prevaricación y desobediencia por la "reunión o encuentro" del ministro con la vicepresidenta del gobierno venezolano de Nicolás Maduro, Delcy Rodríguez. Un encuentro que se dio en una terminal del aeropuerto de Barajas el pasado 20 de enero. Pero no sólo los naranjas anzuelo movido ficha. El Partido Popular se ha personado en un juzgado de guardia para impedir que se destruyan las imágenes del encuentro en Barajas. Los populares piden que AENA no destruya las "pruebas".

El 'Delcygate', tal como se conoce este caso, es el que más horas de tertulias está llenando la capital madrileña desde hace un mes. No se habla de otra cosa. El ministro Ábalos no ha parado de reiterar que a él "no lo echa nadie". Pero el caso está siendo el primer conflicto abierto entre el gobierno socialista con Podemos contra el principal partido de la oposición, el PP, junto con Ciutadans. Por su parte, Vox ha llevado a la fiscalía al ministro y el consejero de Renfe, Koldo García Izaguirre, persona próxima a Ábalos. El partido de ultraderecha considera que García Izaguirre fue uno de los "testigos" de este encuentro.

El PP, Ciutadans y Vox reprochan que la vicepresidenta venezolana tiene vetada la entrada en territorio europeo por "su participación en la represión y corrupción de la dictadura venezolana", tal como afirma el mismo Abascal. Y acusan en Sánchez de cambiar su estrategia favorable a Maduro por haber cerrado un gobierno de coalición con Podemos.