Cambio de criterio en poco más de una semana. Después de que el lunes de la semana pasada negara rotundamente que el 1-O se pagara con dinero público, ahora el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, asegura que nunca ha dicho que no hubo malversación para el referéndum. Así lo ha soltado en el pleno del Congreso, donde ha insinuado que "puede haber un falseamiento de facturas" por parte del Govern, y ha preguntado al aire: "¿Cómo tengo que decir yo el contrario? Si puede haberlas".

De hecho, el titular de Hacienda lo ha dicho así después de que el líder de Cs, Albert Rivera, le haya acusado de ayudar a los independentistas en su defensa de que no hubo malversación para la celebración del referéndum. Incluso, le ha emplazado a releerse la entrevista en El Mundo, donde exactamente puso encima de la mesa: "Yo no sé con qué dinero se pagaron estas urnas de los chinos del 1-O, ni la manutención de Puigdemont. Pero sé que no con dinero público".

Y no sólo eso. Montoro también lo aseguró así en una comparecencia ante la Comisión de Hacienda y Función Pública días antes de que más de dos millones de catalanes fueran (y defendieran) las urnas para poder votar sobre su futuro y después de que su departamento interviniera las cuentas de la Generalitat.

Trata a Rivera de tonto

Ante todo eso, ha reprochado al presidente de Cs "no saber qué es un procedimiento administrativo" porque, según su opinión, "no ha estado a cargo de ninguna gestión directa" y le ha pedido que lea: "Se tiene que leer de vez en cuando. Es un poco pesado leer, pero, de verdad, se tiene que leer en la época que estamos", ha vacilado.

El ministro español ha empezado su intervención felicitando a los suyos, Cs y el PSOE porque "si hoy Catalunya sigue siendo España" es gracias a ellos en aplicación del artículo 155 de la Constitución española y lo ha reiterado así varias veces: "Catalunya no es independiente por la actuación del gobierno de España y después por las acciones de la justicia, las acciones preventivas y las investigaciones, por este orden".

Montoro ha continuado manteniéndose en su defensa queriendo dejar claro que el gobierno del cual forma parte es una democracia y ha apuntado que "la democracia es la discrepancia y la división de poderes". También ha insistido en que "queremos que devuelva la normalidad y el cumplimiento de la legalidad y el gobierno está para velar por eso", ha añadido, al mismo tiempo que ha lanzado otro mensaje a Rivera soltándole que "no nos equivocamos" porque "todos tenemos responsabilidades".

Precisamente en este sentido, Montoro ha tirado todavía más piropos a su gobierno y ha insistido en la idea: "Si no hubiéramos intervenido las cuentas en Catalunya, los separatistas habrían tenido centenares de millones de euros en sus manos y no los tuvieron". Ahora bien. También ha señalado que "y si han falsificado, tendrán que responder por eso".

Lo negará tres veces

De forma similar a cuando Jesús le dijo al apóstol Pedro que "antes de que cante el gallo, me negarás tres veces", Montoro ha insistido en tres ocasiones que el referéndum no fue pagado con dinero público.

La primera fue durante la comparecencia mencionada ante la Comisión de Hacienda y Función Pública días antes de que se celebrara el referéndum y después de haber intervenido las cuentas de la Generalitat. La segunda fue en febrero, cuando, en un informe entregado al juez del 13 de Barcelona insistió en que no se había destinado dinero público al 1-O y, la tercera, la semana pasada en la entrevista en el diario citado.

Y no sólo lo hizo él. Después de esta entrevista, el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena soltó que la Guardia Civil cifra en 2 millones la malversación del 1-O y, al día siguiente, la secretaria general de Financiación Autonómica y Local, Belén Navarro, ratificó las palabras de Montoro. Además, el presidente español, Mariano Rajoy, también lo negó en el Congreso el pasado 7 de febrero, cuando aseguró que "no se dedicó ni un solo euro del FLA al referéndum ilegal que supuestamente se tenía que celebrar en Catalunya".

En definitiva, las palabras pronunciadas ayer por el abogado del Estado, que comunicó ayer al juzgado 13 que considera "acreditada" y "obvia" la "utilización de fondos públicos para promover y organizar" el referéndum del 1-O, podrían haber conseguido, quizá, el efecto deseado.