El papel de Yolanda Díaz y su "plataforma amplia", tal como ella misma la llama son percibidas como una amenaza por Podemos, un partido que cae encuesta tras encuesta y que aguanta por el relevante papel de la líder de la colación con Izquierda Unida (Undias Podemos) dentro del Gobierno, ya que la vicepresidenta segunda siempre ha sido una de las mejor valoradas de todo el Ejecutivo según los sondeos del CIS. A última hora se llegó a un acuerdo con Podemos Andalucía para que este partido también formara parte de la plataforma Por Andalucía que estaba promovida por la misma Díaz (incluso fue a la Feria de Abril a hacerse fotos con los líderes de todas las formaciones que la conforman), tan a última hora y después de días de intenso debate que llegaron tarde a presentar los papeles. Todo ello ha provocado que el partido vaya disolviéndose en la autonomía después de años de tensiones y luchas internas, protagonizadas, por ejemplo, por Teresa Rodríguez que ahora lidera Adelante Andalucía. Todo deja un terreno muy complicado y que da pie a confrontaciones entre los morados y Díaz, que se han ido repitiendo por el papel más moderado de esta última, mientras que la secretaría general, Ione Belarra, se muestra más peleona y provoca conflictos con sus socios socialistas. Ahora, otro de los pesos pesados del partido en el Gobierno, Irene Montero, ha querido salir al paso y aclarar todas las dudas: Podemos se entenderá con la vicepresidenta en el marco de su nuevo proyecto.

"Este proyecto sobre todo tiene que contar con ella. Es ella quien decide los tiempos y el cuándo. Nosotros lo que tenemos que hacer es demostrar con hechos para que estamos aquí", ha defendido Montero en declaraciones en la cadena SER. Concretamente, se ha fijado en el caso andaluz, ya que hasta último momento Podemos no dio su brazo a torcer en las negociaciones, pero finalmente "hemos hecho lo que nos pedía a Yolanda: ser el partido más generoso". Esta generosidad, sin embargo, no ha sido suficiente y Podemos se ha quedado fuera de la plataforma y en una situación muy complicada.

Con la ultraderecha al horizonte

Montero, ministra de Igualdad, ha querido hacer valer su tarea: "Cuando gobierna Podemos la vida de nuestras mujeres es mejor. Nos toca aportar nuestra generosidad y fortaleza", ha dejado caer, activando el miedo a un posible gobierno de coalición entre PP y Vox, siguiendo la línea de lo que ahora mismo apuntan las encuestas, especialmente de cara a las elecciones de junio en Andalucía, adelantadas por el presidente popular Juan Manuel Moreno y donde Vox cuenta con la polémica Macarena Olona como candidata, aunque se haya empadronado en la casa del presidente de Vox en Granada, donde ni vive ni nació, para poder presentarse. En este sentido, ha adelantado que si son ellos los que gobiernan "habrá recortes de derechos y libertades muy profundas, los de las mujeres y las personas LGTBI primero".

Ante la quiebra de su partido en Andalucía, Montero cree que con estas elecciones a la vista, surge una pregunta clave: si se quiere un "estado que aporte soluciones o que aporte problemas". Por eso, ha vuelto a referirse a la derecha, recordando que cuando "gobiernan ellos y más con la extrema derecha se acelera la involución democrática, la pérdida de derechos la corrupción, las privatizaciones, los cierres de centros de salud, la degradación del sistema educativo... Cuándo menos gobiernos de coalición hay, más capacidad tenemos para ser valientes", ha concluido.