Las relaciones entre estos dos socialistas nunca han sido espléndidas. El último caso de que los ha confrontado lo ha certificado. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, fue directamente y decidió destituir al responsable de la Guardia Civil que hacía de enlace con el JEMAD sin consultarlo a la ministra de Defensa, Margarita Robles. Aunque es un cargo que une ambos ministerios, la decisión se tomó por la vía directa.

Posteriormente a cesar este cargo que también se había beneficiado de la vacunación a pesar de no ser un colectivo autorizado para recibir la primera dosis, Grande-Marlaska decidió informar en Robles de que acababa de recolocar a este responsable en otr lado. No le consultó pero hay que recordar que los nombramientos más relevantes dentro del Instituto Armat suelen llevarse a cabo de manera conjunta.

La Guardia Civil depende de Interior con respecto a servicios, retribuciones, destinos y medios, mientras que los ascensos y misiones corresponden al ministerio que dirige actualmente Margarita Robles para ser un Cuerpo de naturaleza militar. Según confirma el digital El Independiente, aseguran que desde Defensa han remarcado que Robles está "muy molesta con la forma de actuar" de Grande-Marlaska.

Desde Interior quisieron marcar perfil y ser ejemplares y es evidente que su imagen ha salido reforzada mientras que Robles ha ido a remolque y ha intentado suavizar a todas las críticas hacia un colectivo de militares aleccionador que, por la puerta de atrás, actuaban de forma contraria en lo que predicaban. La 'gran decisión' de Robles fue pedir un informe para tomar decisiones. No hizo falta, la destitución de este Guardia Civil va precipitar la dimisión del jefe del JEMAD, Miguel Ángel Villarroya.

Malestar dentro de la Guardia Civil

Para evitar volver a vivir un escándalo de esta magnitud, la Guardia Civil ha ordenado a los responsables de todas sus unidades que nadie se vacune y ha recordado las normas marcadas por el ministerio de Sanidad. Marlaska, nuevamente, se ha avanzado y ha hecho llegar una circular informativa que invita a todo el mundo, prever malas praxis. La Asociación Pro Guardia Civil exige al ministro tener acceso al plan de vacunación y exige explicaciones: "Queremos saber si el cese ha sido para ser el cabeza de turco para dar ejemplo".

Los precedentes que confirman la mala relación entre ministros los encontramos en la gestión de la Filomena en Madrid, determinar la concesión de medallas de honor al personal de defensa durante la primera ola o la gestión de la crisis de inmigrantes en las Canarias.